Capítulo 38

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Narra Luis

Había arrastrado a mi abuelo a su oficina para poder hablar, pero me había ordenado que me sentara y esperara, él había salido a hacer una llamada ya habían pasado como veinte minutos y aún no había vuelto.

Tenía aun esa sensación que estaba pasando algo que todos sabían menos yo, quería salir e ir junto a Nicholas pero no podía, tenía que esperar a que mi abuelo vuelva, tenía muchas cosas que preguntar.

Luego de un rato de estar sentado finalmente mi abuelo había vuelto.

—Hasta que vuelves—Me levante de la silla, estaba irritado.

—Cálmate Luis—Dijo enfadado—¿Puedes explicarme por qué golpeaste a tu primo?.

Me hizo esperar más de media hora en su oficina y lo primero que me pregunta es sobre dante.

—Ja, soy yo el que te tiene que pedir explicaciones de que mierda está pasando en este maldito hospital. Por tu reacción puedo saber que estabas al tanto de lo hacía Dante, ¿O me equivoco?

Mi abuelo me miró fijamente, no había cambios en su expresión que pudiera delatarlo.

—No lo niegas—No sé qué esperaba, Antonio tenía razón—Entonces tu estabas al tanto, ¿No es así?

—Los procedimientos realizados no eran los correctos, por supuesto que me di cuenta, acaso piensas que un tonto niño puede engañar a todo un sistema.

—Porqué no me lo dijiste.

—¿Acaso no ves como quedo tu primo por tu culpa?—Fue hasta su escritorio, saco una carpeta y lo dejo sobre su escritorio—Ya sabía cómo terminaría esto, por eso no te lo dije.

—No, si me lo explicaras correctamente tal vez...

—Léelo—Ordeno, me señalo la carpeta que estaba en sobre su escritorio.

Comencé a leer el contenido de la carpeta, era el expediente del que me había hablado Antonio.

—Piensas que no me daría cuenta con un informe así, no seas tonto—Dijo.

La puerta se había abierto de pronto, era el señor Hugo el abuelo de Nicholas. Me miro con cautela, como si el más mínimo movimiento lo delataría.

—Hugo, ¿Paso algo?—Mi abuelo parecía preocupado.

—Sigue diciendo que no dirá nada, que no tiene nada que decir—Respondió el señor Hugo en un tono cauteloso.

Deje la carpeta sobre el escritorio.

—Que pretenden hacer.

Ambos me miraron, sin decir ninguna palabra. Otras personas pensarían dos veces antes de hablar en frente de ellos, los dos grandes líderes de dos grandes generaciones.

—Creo que te darás cuenta que ya no eres necesario—El señor Hugo se acercó a mi—Gracias por estar al lado de mi nietos durante todos estos años.

Mi abuelo desvió la mirada sin decir nada.

—¿De que estas hablando?—No tenía un buen presentimiento de esto.

—A estas alturas seguro que ya estas al tanto que tu matrimonio con mi nieto, fue para que él tenga la influencia y el apoyo de una de las más grandes familia, que solo se podía lograr con el matrimonio. Pero como acabaron las cosas creo que es momento de que su matrimonio llegue a su fin.

—No hay ninguna posibilidad que me separe de él.

—No es algo que tú decidas—El abuelo de Nicholas tenía el mismo color de ojos que él, su mirada era fría y cruel, pero si pensaba que me intimidar estaba muy equivocado.

Un Matrimonio Arreglado [Borrador]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora