Capítulo 41: Consecuencias

1.8K 202 73
                                    

Las manos de Naruto recorrían con fogosidad y pasión cada centímetro de piel que era capaz de alcanzar del cuerpo de Sasuke. ¡Cómo había echado de menos tenerle de esa manera! Cada día que estuvo separado del moreno, Naruto no dejó de pensar en Sasuke: en pasar tiempo con él, reír a su lado, bromear, discutir por tonterías... pero tampoco se pudo quitar de la cabeza su fragancia, ésa que en ese instante se impregnaba en su ropa y capturaba con sus fosas nasales; sus deliciosos labios, los cuales ahora devoraba como si no hubiera un mañana; y su níveo y fuerte cuerpo, el que ahora era incapaz de dejar de acariciar.

- Hmm.

Un gemido se escapó de los labios de Sasuke y acabó ahogándose en la boca de Naruto cuando éste alcanzó sus duros y sonrosados pezones. Aquel sonido fue música para los oídos del rubio, quien repitió la acción con un poco más de presión con tal de darle un placer mayor a Sasuke y volver a escucharle gemir.

La respuesta no se hizo esperar por parte del moreno, dejando salir de nuevo ese gutural sonido, deleitando al rubio. Pero no fue la única reacción del moreno, sino que, instintivamente, sacó sus garras con la intención de desgarrarle la ropa a Naruto y dejarle en igualdad de condiciones.

En el momento en que el antiguo alfa sintió que las garras se clavaban en su prenda superior, sostuvo ambas muñecas y detuvo a Sasuke.

- No me importaría nada dejarte destrozar mi ropa por la pasión, pero, a diferencia de ti, no he traído ninguna de repuesto hoy – le comentó Naruto tras abandonar momentáneamente los labios de Sasuke.

- Pues ya estás tardando en quitártela – le exigió el beta con un tono impaciente que dejaba entrever una advertencia: si Naruto no se desnudaba ya, Sasuke lo haría y le daba igual que Naruto tuviera que volver desnudo a casa.

Una sonrisa traviesa se dibujó en los labios del rubio al captar la ligera amenaza. Sin perder tiempo, Naruto se quitó la cazadora primero y la lanzó hacia el sofá, para después agarrar a la vez la sudadera y la camiseta que llevaba debajo y deshacerse de ambas prendas juntas. Ahora llegaba el turno de la parte inferior.

Mientras el rubio se ponía en pie junto al sillón y se descalzaba, los ojos de Sasuke viajaron por su pecho desnudo. Con la ropa no se notaba, pero ahora podía ver que Naruto había estado entrenándose duro en Alaska. Estaba más musculoso que la última vez que le vio en una situación similar.

La mirada del moreno descendió hacia la entrepierna de Naruto una vez éste se quitó las prendas que le quedaban y se quedó en igualdad de condiciones que él. No pudo evitar relamerse cuando vio el erecto miembro del rubio casi como si le saludara después de tanto tiempo sin verse mutuamente.

Inconscientemente, Sasuke quiso ir hacia Naruto para disfrutar de lo que su cuerpo desnudo le ofrecía, pero un fuerte tirón sobre su cuello, que casi lo deja sin respiración, le impidió hacerlo.

- ¿Estás bien? – preguntó Naruto preocupado.

- Sí – le respondió Sasuke metiendo un dedo entre el collar y su cuello para poder respirar mejor.

- No es...

- No te preocupes, no quiero quitármelo ni que tú lo hagas – le interrumpió al intuir lo que iba a decir.

Ambos sabían que era más seguro que se mantuviera amarrado, no querían correr riesgos. Aunque a Sasuke no le importaba realmente, no sabía por qué, pero la idea de follar atado con Naruto le calentaba de una forma inusual para él.

- Ahora ven aquí y acaba lo que has empezado – le ordenó ante la sorpresa de Naruto.

- Tan mandón como siempre – le dijo Naruto con una amplia sonrisa. ¡Ese chico nunca cambiaría! Tampoco quería que lo hiciera.

Twain Harte (Naruto: Naru-Sasu, Kakashi-Minato)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora