Historia escrita por dos autoras: Kaoru Himura y Fullbuster
Kakashi se hallaba en el interior de la vivienda de los Namikaze durante su turno de vigilancia. Sin embargo, aquel era diferente a los anteriores turnos, ya que el ambiente reinante era menos tenso.
- ¿Se puede saber por qué sonríes? – preguntó Minato mostrando un puchero de sus labios.
- Es que... no puedo evitar hacerlo cuando te veo de esta forma.
- ¿De qué forma?
- Cuando estás tratando de perdonarme pero sigues sintiendo ese malestar que te hace estar un poquito cabreado conmigo.
- ¿Un poquito?
- Sí, un poquito – sonrió Kakashi –. Cada vez que veo que pones ese semblante me haces acordarme de nuestra primera cita.
- Aquello no fue una cita.
- Sí lo fue. Yo lo recuerdo claramente como una cita.
- No. Una cita es algo romántico, solos tú y yo.
- Estábamos sólo tú y yo y... para mí fue romántico. Estaba contigo, no necesitaba nada más. Aunque te pasaste media cita enfadado conmigo.
- Porque me cabreabas en todo momento.
Kakashi sonrió dando un sorbo a su té preferido. Minato era un hombre de fuerte carácter y aunque lo disimulaba muchas veces con su paciencia sobrehumana y su cordialidad, verle con esos pucheros provocaba la sonrisa inmediata de Kakashi. De ese chico se enamoró hace años y seguía enamorado de él. Por él, haría lo que fuera.
Flashback
Concentrado como estaba, moviendo sus dedos por las llaves del instrumento y soplando suavemente en su boquilla, la vibración del aire reproducía un sonido realmente hermoso.
A esas horas de la tarde, ya no quedaba nadie en el instituto y para él, era la mejor hora para practicar. Le encantaba la música, pero las aulas solían estar llenas antes de las tres de la tarde y era por ese preciso motivo por el que Minato siempre esperaba hasta las tres y media, cuando todos los alumnos se marchaban a sus casas, para apoderarse del aula vacía de música.
Desde la ventana abierta donde las finas cortinas se mecían con la brisa que entraba, escuchaba el jaleo de los jugadores de fútbol americano. ¡Eran un incordio! Y el peor de todos... era sin duda Kakashi Hatake, el chico nuevo que se había vuelto el más codiciado del puñetero instituto por muchas muchachas y que, últimamente, le veía rondando por los pasillos del aula de música. Por alguna extraña razón, él, que siempre había sido más o menos invisible para los deportistas, ahora era visible para uno de ellos y no uno cualquiera. Kakashi era realmente pesado y solía querer mantener algún tipo de discusión verbal con él por el simple hecho de tenerla. Minato no entendía nada.
¡Se desconcentraba! Lo supo cuando la melodía desentonó cuando falló en la colocación de uno de sus dedos y sonó un molesto chirrido que le hizo apartar la boca de la boquilla del instrumento y permitirse el lujo de descansar unos segundos.
Con el clarinete aún entre sus manos, escuchar el grito de alguien le hizo girar el rostro hacia la ventana viendo cómo entraba el balón de fútbol americano por ella directo hacia él. Instintivamente, puso las manos delante para proteger su rostro y entonces, la pelota golpeó el instrumento obligándole a soltarlo. El clarinete cayó al suelo inevitablemente mientras Minato sostenía los dedos donde había golpeado el balón con la otra mano con una mueca de dolor en su rostro.
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Twain Harte (Naruto: Naru-Sasu, Kakashi-Minato)
FanfictionHistoria creada por Kaoru Himura y Fullbuster. Una mordedura le cambió, le hizo caer en el infierno para encontrar entonces el amor, pero en un mundo regido por las normas sobrenaturales, descubrió la traición. Años después, el lobo alfa que una vez...