Los vampiros han vivido ocultos entre los humanos durante siglos, sin embargo su presencia a creado una mutación en estos últimos, los llamados "seres feéricos" pueden ser distinguidos por su cabello naturalmente blanco, y para la criatura su olor y...
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Para el momento en que Heechul despertó el sol ya estaba bastante alto en el cielo. Se desperezó como un gato antes de levantarse para poder observar su cuerpo en el espejo de cuerpo completo de la habitación.
Esta vez no había la menor marca en su piel de su encuentro anterior, recordó vagamente a Siwon cerrando las heridas, aunque estaba algo dormido para entonces recordaba bien la sensación de su lengua fría contra su piel, en definitiva quería probarlo completo.
Una media sonrisa traviesa asomó a su rostro, aún creía que se iba a divertir bastante con él a pesar de esa mirada acusadora que le había dedicado la noche anterior. Esa clase de criaturas que no se divertían para nada solían tener reacciones muy divertidas cuando algo los tentaba fuera de su inmaculada moralidad, y Heechul deseaba sobremanera ser esa tentación para Siwon.
Bajó entonces a la cocina para prepararse un nutriente batido, lo bebió aunado a una serie de vitaminas que le ayudarían a reponer la sangre perdida. Estaba un poco preocupado por la rapidez con la que había sucumbido la noche anterior, aunque supuso que se debía a que eran dos las criaturas que se habían alimentado de él.
Una vez que acabó el batido se dirigió al pequeño "gimnasio" que tenía en uno de los cuartos de la planta principal, un poco de ejercicio le ayudaría a distraer su mente, además que necesitaba mantener su cuerpo en forma para resultar atractivo a sus clientes, esa era la razón también por la cual llevaba una dieta especial, no quería amargar su sangre con grasas o cosas por el estilo.
Él mismo se consideraba como una "mercancía de alta calidad" así que debía tratarse como una.
Sin embargo no se sobre exigió aquella tarde, simplemente hizo algo de cardio ligero para después ducharse y comer. Para cuando terminó aún faltaban algunas horas para el anochecer, así que simplemente se recostó en uno de los grandes sillones de la sala para ver la televisión, aunque no tardó en dormitar un poco en aquella posición.
Despertó apenas a tiempo para volver a bañarse y arreglarse antes de que Siwon apareciera, puso especial atención en maquillar las marcas bajo sus ojos, un delgado delineado y un profuso cepillado a su cabello blanco completaron su imagen, se vistió con simple elegancia, con una camisa blanca abierta hasta casi la mitad del pecho, un pantalón y zapatos negros de vestir.
Para cuando llegó la criatura Heechul ya esperaba cómodamente en la cocina, acompañado por una copa de vino tinto. Siwon apareció por la puerta principal, dando todas las indicaciones de su presencia aunque el humano no se levantó hasta que estaba casi frente a él.
—Hola, mi bello Siwon, es un placer volver a verte.
El pelinegro arqueó una ceja ante el apelativo, aún así saludó con una cortés inclinación de cabeza.
—Buenas noches, Heechul.
—El volver a verte me da cierta esperanza, así que me animaré a preguntarte ¿has analizado mi propuesta?
—Sí, pero aún hay ciertas preguntas que quiero hacerte.
—Adelante, —Heechul hizo una seña para invitarlo a sentarse a su lado—, contestaré a todo lo que pueda.
Siwon se sentó mientras repasaba sus preguntas en su mente, intentaba no distraerse por la imagen tentadora del humano o por su delicioso olor.
—Si yo no aceptara, ¿qué harías?
Heechul se quedó un poco sorprendido por aquella pregunta pues no la esperaba, aunque no dudó en contestar.
—Bueno, lo más probable es que me mantenga aparte hasta encontrar un nuevo protector, como hasta ahora. Mi ventaja es que ahora Hae conoce más a EunHyuk así que puede presentarme a alguien más.
Percibió un extraño brillo en los ojos de Siwon que nada tenía que ver con su tonalidad violeta.
—No puedes confiar en cualquiera.
Heechul rio con cierta fuerza ante este comentario, aunque la criatura pudo percibir un cierto borde agudo en ella.
—Claro que no, ¿crees que hubiera llegado hasta donde estoy si fuera tan descuidado? No, no confiaría en cualquiera te lo aseguro. Tu caso fue especial.
—¿Especial?
—Digamos que tienes buenas referencias, —le sonrió.
Siwon respiró profundo para intentar contener la tentación que le creaba aquella sonrisa, se pasó la lengua por los labios recordando el sabor dulce de su anfitrión.
—Comprendo. Bueno, y en caso de aceptar, ¿deberé vivir aquí, contigo?
—Eso tú lo decides, en realidad a mi me conviene que vivas conmigo —hizo una pausa, como si sus palabras tuvieran otro sentido—, para que la protección sea 24/7, por eso es que pongo a tu disposición los cuartos de abajo, a los que solo tú tendrías acceso.
>Pero conozco lo quisquillosos que son ustedes con respecto a su lugar de reposo, así que si estás más cómodo estando lejos, solo te pediría que vinieras las noches que tengo reunión, lo cual sería una o dos veces por semana.
Por algunos momentos los ojos de Siwon se abrieron un poco más de lo habitual, sorprendido por las veces que el chico entregaba su sangre.
—No necesitas verme así, ni preocuparte en todo caso. Mi naturaleza es diferente a la de los demás: lo que sea que vuelve mi cabello blanco y mi sangre dulce, también logra que mi cuerpo reponga la sangre perdida mucho más rápido de lo normal, además me da esta maravillosa piel que no envejece tan fácilmente.
Siwon se quedó algunos instantes mirando como el peliblanco acariciaba su cara y su cuello con la punta de los dedos, tuvo que respirar profundo para contener las ganas de ser él quien lo tocara.
—¿Qué edad tienes? —preguntó entonces para desviar el tema, pensando en la última frase que había dicho el humano.
—Ah, si fuera mujer podría refutar esa pregunta diciendo que no es cortés hacerla, —se lamentó por un momento Heechul antes de contestar— Y si fueras alguien más, te diría que tengo sólo 35 años, pero ya que eres tú, te confesaré que acabo de cumplir 68.
Siwon lo miró con algo de sorpresa, tenía el doble de edad de la que aparentaba y en definitiva no era algo creíble, aunque no parecía que Heechul mintiera, tampoco tenía razones para hacerlo.
—De todas formas, ustedes son los menos indicados para criticar mi edad, —bromeó, sacándole la lengua al pelinegro, quien de nuevo quedó algo descolocado por la situación—. Bueno, aún no pareces muy seguro así que te diré mi plan, toma esta noche para pensarlo, si quieres hacerme más preguntas adelante.
>Aunque esta noche tengo planeado salir con Donghae y es probable que traiga a su pegote consigo.
De nuevo Siwon lo miró con cierta sorpresa, ¿es que acaso no sentía ningún miedo ante él o ante EunHyuk? No quisiera ni imaginar cómo reaccionaría EunHyuk si lo escuchaba referirse así a él.
—Quizá pueda acompañarte, —tanteó Siwon.
La sonrisa complacida de Heechul fue suficiente respuesta.
