Los vampiros han vivido ocultos entre los humanos durante siglos, sin embargo su presencia a creado una mutación en estos últimos, los llamados "seres feéricos" pueden ser distinguidos por su cabello naturalmente blanco, y para la criatura su olor y...
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Siwon se encontraba aún recostado en el escondite que utilizaba para dormir cerca de la ciudad. Hacía ya varias horas que había despertado pero no terminaba de reunir la voluntad para levantarse.
Aún se sentía triste y culpable por haber lastimado a Heechul, no podía quitarse de la mente esa última imagen, las marcas que había dejado en su cuerpo; él jamás se había comportado así con ninguna de sus presas, fuera quien fuera, aún cuando se alimentaba de maleantes lo hacía con cierto cuidado.
No podía dejar de recriminarse el haber perdido así el control, incluso había terminado utilizando su voz de mando para obtener las palabras que quería oír, de manera que ni siquiera podía saber si eran ciertas o si era su propia influencia hablando.
Eso debía ser, Heechul no podía quererlo luego de lo que le había hecho, de eso estaba seguro.
Un pequeño sonido de vibración a su lado lo hizo despabilarse, levantó el pequeño teléfono que le había regalado EunHyuk cuando recién salió de su encierro y vio justo su nombre que brillaba en la pantalla.
~Hola, ¿Siwon? ~sonó su voz en cuanto contestó.
—Si, soy yo, ¿qué ocurre?
Era extraño, ¿por qué no lo contactaba por el medio habitual? Supuso la respuesta al escuchar como Donghae alegaba con el otro para quitarle el teléfono.
~Hola, hola, ¿Siwon-hyung? ~sonaba algo alterado y eso comenzó a preocuparlo.
—Sí, ¿Qué pasa Donghae?
~Estas con Hee-hyung, ¿verdad?
—No, no lo he visto desde la noche de ayer, ¿por qué? ¿Qué ocurrió?
~No lo sé, me mandó la ubicación de un bar al que nunca habíamos ido, pero no volvió a contestarme ni las llamadas ni los mensajes, ¿y si le pasó algo?
—Tranquilo pequeño, dime dónde es ese lugar e iré a buscarlo.
~Te mandaré la ubicación en un mensaje, Hyuk y yo ya vamos para allá.
Quería pedirle que le pasara a EunHyuk pero colgó la llamada. Pocos instantes después llegó la ubicación, a la que se dirigió utilizando su sobrenatural velocidad, Donghae le había contagiado ligeramente su preocupación.
Lo vio nada más llegar, era el auto de Heechul en el estacionamiento, lo cual probablemente significaba que él seguía adentro. Sin embargo en cuanto iba a entrar al abarrotado lugar sintió la oleada de inquietud, en ese momento salían Donghae y EunHyuk con cara preocupada.
La otra criatura negó con la cabeza nada más verlo, Heechul no estaba adentro. Soltó una maldición baja mientras los dos se acercaban.
—Tal vez alguien más lo llevó a casa o tomó un taxi, tiene lógica si es que había bebido demasiado.
