El Diablo Blair.

Capitulo 13.

Lunes.

Al llegar al hospital, estacioné, até y le puse la alarma a mi moto para luego correr al interior del edificio, subí por el ascensor y al llegar al piso cuatro me encontré con tres doctores.

- Hola, buenos días- Saludé feliz.

- Buenos días señorita Martinez, ellos son los doctores que operarán a tu madre.

- Es un gusto doctores, Morena Martinez - Me presenté.

Ellos asintieron con una sonrisa.

- El es el doctor Malek, el mejor neurocirujano junto con el doctor Tánaris.

- Señorita, vamos a explicarle el procedimiento que le haremos a su madre el día de hoy- Habló Malek.

- Por su expediente, la salud de su madre cada día es mejor, la sangre sale menos de su cerebro, es por eso que decidimos hacerle una operación mínimamente invasiva- Siguió Tánaris.

- ¿Qué quiere decir con eso?

- Que es una operación con riesgos casi nulos- Dijo Malek sonriendo- Repararemos los vasos sanguíneos del cráneo de su madre para luego cerrarlo y cocer la herida.

- ¿Eso tardará mucho?

- Más allá de que sea una operación poco riesgosa, en la cabeza hay muchas arterias, venas, nervios y demás cosas que no podemos tocar, es por eso que necesitamos precisión y tiempo, no puedo saber cuanto tiempo me llevará, pero apenas salgamos del quirófano usted será informada sobre todo lo ocurrido- Me tranquilizó Tánaris.

- Está bien, muchas gracias- Sonreí- Y por favor, sálvenla- Supliqué.

- Haremos todo lo que este a nuestro alcance.

Y sin mas los tres doctores se perdieron por el pasillo.

Yo me encaminé a la habitación de mi madre y entre sin golpear.

- Hola mami- Sonreí- Al fin llegó el tan esperado día.

- Cariño- Dijo feliz- Al fin podremos estar juntas en casa.

- Claro que si, solo teníamos que esperar la ayuda- Sonreí aun mas besando su frente.

- Tengo mucho miedo.

- Oh no mami, no tengas miedo, todo va a salir excelente, te lo prometo- Dije juntando nuestros meñiques.

- Señorita Martinez, tendremos que preparar a su madre para la cirugía, necesito que espere afuera.

- Está bien- Respondí- Te amo- Besé su frente y me marché.

Luego de unos largos minutos los tres doctores y dos enfermeras sacaron a mi madre de la habitación. Me acerqué a la camilla y la miré con lagrimas en los ojos.

- Todo saldrá mas que bien mami, y podremos estar juntas cómo esperamos hace tantos años, te amo.

- Te amo hija, nos vemos a la vuelta.

- Nos vemos a la vuelta mamá- Dije para luego alejarme de la camilla.

Los doctores comenzaron a caminar llevándose a mi madre, fue ahí donde el miedo se apoderó de mi y las lagrimas comenzaron a caer por mis mejillas.

- Morena- Dijeron a mis espaldas.

Giré encontrándome con esos hermosos ojos azules, no pude evitar correr hacia el, necesitaba un abrazo.

Dominic se sorprendió, pero rápidamente aceptó mi abrazo haciéndolo reconfortante.

- Tengo tanto miedo- Dije llorando en su pecho.