Capitulo 16.

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- Mami, despierta- Susurré suave para no asustarla.

Ella se removió y poco a poco fue abriendo los ojos.

- Ya hicimos la comida con Dom, vamos a almorzar- Sonreí.

- Está bien, espérenme abajo- Sonrió sentándose en la cama.

- ¿No quieres que te ayude a bajar las escaleras?

- No cariño, yo puedo- Contestó.

- Está bien mami, nos vemos abajo- Dije insegura.

Me levanté y al cerrar la puerta de mi habitación me acerqué a uno de mis empleados.

- Steve- Susurré- ¿Puedes quedarte por aquí? Mi madre va a bajar las escaleras y no quiere ayuda, mantente cerca.

- Claro que si señorita Martinez- Sonreí para luego bajar las escaleras.

- Mi madre no quiere ayuda- Suspiré acercandome a Dom.

- Es entendible cariño, tu la ayudaste mucho tiempo, ahora quiere arreglarse sola y esta bien amor.

- Si, eso creo, ¿te pregunto algo?

- Claro- Contestó sentándome sobre su regazo mientras me tomaba de las caderas.

- El abogado que tu me dijiste- Dije en un susurro- ¿Podría juntarse a hablar conmigo?

- Claro que si amor, yo te acompañaré si quieres y hablo con el para organizar un horario, luego te paso su número así ya lo tienes.

- Gracias amor- Sonreí besando sus labios.

- Voy a tener que acostumbrarme a esto- Dijeron a nuestras espaldas.

- Mamá- Reí levantándome del regazo de Dom.

- Lo lamento Susan- Dijo riendo.

- Ya, comamos- Sonrió.

Nos pasamos todo el mediodía comiendo y riendo como nunca, mi madre esta en perfectas condiciones y verla tan feliz me alegra la vida.

El timbre corta nuestras risas, es raro que alguien venga a esta hora.

-Señorita Martinez- Me llamó Lina, la ama de llaves de la casa.

- Lina, ¿Qué ocurre?

- ¿Podría hablar con usted a solas un momento?

Me levanté de mi asiento extrañada.

- ¿Todo está bien?- Pregunté en un susurro.

- Es una sorpresa para su madre, por eso la separe, disculpe haberla asustado.

- Oh, está bien, ¿quién es?

- Luke señorita, trajo muchos regalos y pidió que se acerque a la puerta.

- Está bien, vamos- Sonreí- En seguida vuelvo- Le dije a Dom y a mi madre con una sonrisa- No se muevan de aquí.

Corrí hacia la puerta encontrándome con muchísimas cajas envueltas en papel de regalo de diferentes colores y a Luke detrás con una gran sonrisa.

- Necesito ayuda pequeño diablo- Me dijo sonriendo.

Yo reí y lo ayudé entrando las cajas rápidamente para que nadie sospeche la tardanza.

Luego de acomodar todo, abracé a Luke, lo había extrañado.

- Que bueno que volviste- Sonreí.

- Estoy feliz de haber vuelto, ya luego te contaré- Sonrió.

El Diablo Blair.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora