BETWEEN YOU (Losing Virginity II)

47 | LA VERDADERA RAZÓN

ERIC

Luego de cenar nos dirigimos hacia el elevador del hotel. 

Zach y Lenn han dejado a Mary-Emm en la guardería y están más que tranquilos al respecto porque les dieron la opción de descargar una aplicación, con un código especial que les permite ver las cámaras de seguridad del lugar, así que mi sobrina no es mi exacta preocupación en este momento, lo es Val. 

Mientras que todos están más que animados, incluso Gregg y Julie parecen empezar a llevarse mejor, ella estuvo un poco cabizbaja toda la cena y yo no puedo dejar de pensar en lo que sea que el imbécil de Jacob le haya dicho, aunque ya me hago una idea, y eso no ayuda para nada a tranquilizarme. Los únicos dos pensamientos que rondan por mi cabeza son: romperle la cara a Wostern y consolar a Val. Pero al parecer no puedo hacer ni uno ni otro, porque Jacob está en Nueva York, y Val está demasiado enfrascada en sus pensamientos como para prestarme un mínimo de atención. No la culpo por eso, pero no puedo evitar que me moleste, y me duela un poco, saber que siempre hará lo mismo: encerrarse en sí misma y no dejarme saber qué sucede, o cuáles son sus problemas hasta que tenga una resolución final de ellos. Siempre soy el último en enterarme de todo, claramente.

Cuando entramos al club nos dirigimos hacia un apartado que Less reservó esta mañana y los sentamos alrededor de la mesa. La música me retumba en el cerebro y siento que estoy de malhumor, pero eso se disipa un poco cuando Val se sienta al lado mío y me sonríe por lo bajo para luego acariciarme la rodilla suavamente con su mano.

—¡Bueno! — grita Julie, con una sonrisa que me da miedo—. Hora de la ronda de shots, gente.

Hago una mueca.

—¿Shots? — pregunta Less con cara algo preocupada, Julie asiente emocionada y llama a un mozo con su mano —. No te enfades, Juls, pero mi cuerpo ya no aguanta el alcohol como antes.

—¡Incluso mejor! ¡Gastarás menos y te embriagarás más! 

—Yo no puedo beber, chicos — Julie abre la boca para quejarse de las palabras de Lenn, pero ella la interrumpe —. Sigo amamantando. — contesta en tono obvio.

Julie parece decepcionada y mira a Val con ojos de cachorro. 

Por alguna razón, siento que ella dirá que no quiere beber, pues no se le ve de humor, así que abro mi boca para contestarle a Julie, pero antes de que yo pueda decir algo, escucho a Val decir:

—¡Cuenta conmigo! — suelta un bufido —. Planeo llevarme la borrachera de mi vida esta noche.

Julie aplaude emocionada y se encarga de hacer su pedido al mozo que se acerca a la mesa. Miro a Val con una ceja enarcada.

—¿En serio ese es tu plan?

—¿Algún problema?

—No, claro que no — aclaro mi garganta —. Es solo que a ti nunca te gustó mucho lo de beber de más y todo eso.

—Bueno, hoy tengo ganas de hacerlo — responde simple, encogiéndose de hombros —. Quizás me ayude a aclarar mis ideas.

Susurra la última parte, más diciéndoselo para sí misma, pero la escucho y en cuando la miro, ella baja la mirada. 

—¿A qué te refieres con eso? — indago, pero no me contesta. Suspiro pesadamente —. Val, ¿algo anda mal?

Cuando se vuelve hacia mí, puedo ver la lucha que se genera en su interior a través de sus ojos. Puedo ver lo mucho que pelea con lo que sea que sucede dentro de ella, con lo que sea que pasa por su cabeza cuando me mira. Pero al final, siempre termina cerrando un segundo los ojos para luego llenar de aire sus pulmones y suspirar levemente.