¿Alguna vez has escuchado del cuarto cielo?.
Según las sagradas escrituras celestiales, existen cuatro tipos de cielo, que son habitados por distintas entidades.
En el primer cielo, habita Dios, el supremo guía de la humanidad.
En el segundo cielo, se encuentran todas aquellas almas que consiguieron la paz antes de abandonar el plano terrenal. Aquellas que habían confiando y creído en Dios, hasta su último aliento y ahora tenían un descanso eterno.
En el tercer cielo, están todas quellas almas que aún no son juzgadas por el Real Consejo y viven en la oscuridad, esperando el momento en que sean llamados.
Y por último, está el cuarto cielo. Aquel, dónde todos los seres celestiales habitan. En el, se encuentran todas aquellas almas, que han conseguido la pureza necesaria, para ser seres de luz y ángeles. Leales servidores de Dios.
El cuarto cielo, podrá ser el último en la lista, pero es el más importante de todos. Los habitantes de este cielo tienen una gran misión por cumplir, y esa es: cuidar a los seres humanos de todo peligro y tratar de evitar las catástrofes en la tierra.
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