Lo que sentimos| Camren

Capítulo 5

Narrador omnisciente

Jesus se tiró en el sofá de cuero negro de la sala de televisión, puso los pies en alto y encendió el canal de deportes, parecía un niño recién llegado de la escuela, con la ropa torcida y arrugada por las actividades del día.

-iNo pongas los pies calzados en mi sofá! - dijo Lauren bruscamente entregándole un vaso de jugo de fruta.

-iLo siento mamá! - respondió Jesus tomando el vaso de la mano de su amiga y sentándose correctamente. - Hoy fue demasiado agotador. - habló desabotonando los botones de su camisa hasta el pecho.

-iPara mi también! Fui a un reclutamiento en la agencia de Angelina y luego tuve que correr a la oficina para revisar algunos proyectos. iEstoy muerta! - habló Lauren sentada junto a su amigo. Llevaba una bata de baño y su cabello estaba envuelto en una toalla blanca.

-¡¿Vas a contratar un nuevo empleado? ¿No habías dicho
que tenías la intención de trabajar con un equipo pequeño?-
preguntó Jesus mientras bebía su jugo y se concentraba en las noticias de la televisión.

-Sí, pero este nuevo contrato necesitará más gente, así que nos vimos obligados a buscar a alguien en el mercado.-Lauren se quitó la toalla de la cabeza y la frotó en su cabello mojado.

-Ya veo ... iMIERDA! ¿Real Madrid perdiendo? - gritó Jesus en rebeldía apretando los puños.

-Aff ... iTú y tu equipo! - respondió Lauren con voz de malestar.

-iiiNo es un equipo cualquiera !!! iEs Real Madrid!- respondió Jesus cortante terminando de tomar el jugo en sus manos. - Pero volviendo al tema ... - Dijo cambiando de canal-  ¿Encontraste a alguien? Conociéndote como te conozco y sabiendo lo exigente que eres, debe haber sido difícil encontrar un empleado.

-Sí, lo hice. Fue ... una especie de casualidad, aunque odio depender de la suerte. - Dijo tomando su copa sobre la mesa.

-¿Qué suerte tienes? - Preguntó Jesus concentrado en la imagen de una modelo en la televisión.

-Hoy no la habían llamado a la selección, aun así fue a la agencia a tomar su currículum, terminamos reuniéndonos en la recepción, estaba rogando por participar, así que se lo permití. - respondió tomando a Apolo, quien le rozó las piernas y lo coloco en su regazo.

-¡¿ELLA?! - Dijo Jesus dándose un sobresalto en el sofá.- ¿Entonces contrataste a una mujer? ¿Y ella es hermosa? - Se acercó a su amiga sobresaliendo mientras sonreía.

Lauren miró a su amigo con reproche, pero terminaron sonriendo juntas. - iAparentemente sí! - Dijo bebiendo de su vaso.

-¿Qué quieres decir con "aparentemente"? - preguntó Jesus enarcando una ceja y volviendo la cabeza con sospecha.

Lauren resopló y echó la cabeza hacia atrás. - No me di cuenta mucho. ¿Ella era linda? ¡¿Quizás?!. Pero en la tensión de elegir a alguien, me concentré en otras habilidades. - respondió aún riendo.

-iHmm! Querida amiga, creo que tu capacidad de percepción está perdiendo su calibre. - Dijo mirándola.

-iNo! No me estoy perdiendo de nada, pero si me enfocara en la belleza de las candidatas, no llegaría a donde querría
estar. Y por algo estoy aquí. - Lauren tomó el control y cambio a las noticias, terminando de beber su jugo.

Jesus tomó a Apolo en sus brazos, quien se retorcía desesperadamente al principio, pero pronto se acomodó en los brazos del chico que se alejaba de su amiga.

-¿Esperas que ella haga un buen trabajo? O mejor dicho, ¿estás segura de que es una buena elección? -preguntó mientras acariciaba la cabeza del felino que cerraba los ojos con satisfacción.

-iSi bien! No puedo decir que tenga razón, pero ella mostró ingenio y habilidad creativa, así que espero que sí ...- Dejó el vaso, ahora vacío, sobre un hermoso soporte acrílico en la mesa de café, continuando. - Lo sabré con seguridad solo con el piso del proyecto, pero tengo confianza. Mañana empieza.

-iEntiendo!- Jesus se quitó los zapatos, colocándolos a un lado del sofá. - ¿Entonces significa que mañana tendremos carne nueva en la empresa? - sonrió él.

-iNo quiero que obstaculices el trabajo de mis empleados!- habló Lauren con dureza, moviendo el televisor en busca de algo que ver.

-Ahhhh ... sabes que no me meto en el camino. Solo quiero ver a la chica. De hecho, si no lo has notado, es muy posible que no me interese. - dijo poniendo sus manos detrás de su cabeza mientras colocaba sus pies sobre la mesa de café.

Lauren realmente no había notado a la chica que había seleccionado de esa manera, se dio cuenta de que era una chica normal, pero no estaba segura de cuánto podría o no llamar su atención. No estaba interesada en tener nada con alguien en la oficina.

Jesus se quedó dormido en el sofá en esa posición perezosa e incómoda, era realmente increíble cómo podía ser tan descuidado y espacioso, ciertamente irritaría a cualquiera y no sería diferente con alguien tan irascible como su amigo.

-iiOye!! - Lauren le dio un codazo, haciéndolo regresar del trance. - ¿No crees que es mejor ir a TU apartamento? Hasta donde yo sé, esto no es un albergue.-Dijo levantándose y tomando los vasos.

-Perdón. Me quedé dormido sin darme cuenta. - Dijo Jesus mientras se pasaba las manos por su cabello castaño oscuro y despeinado. Era un chico típico en cuanto a su apariencia, siempre con el pelo recortado y la barba bien arreglada, además de practicar diversos ejercicios físicos que mantenían su cuerpo en forma.

-iTodo bien! Pero hoy no estoy dispuesta a recibir una visita, así que puedes irte. - respondió Lauren, retirándose hacia la cocina, siendo seguida por su amigo que llevaba sus zapatos con ella.

-¡Qué amargada estás! ¿De verdad tendrías el coraje de expulsar a tu único, por cierto, amigo así ? Cansado, sin fuerzas para conducir, arriesgando un accidente. - dijo Jesús con cara de dramatismo mientras Lauren ponía los vasos en el fregadero y se dirigía a su habitacion de arriba.

-Los taxis y los servicios de transporte público son para eso, ¿no?!! Además hay Uber, donde puedes beber agua y chupar caramelos- dijo Lauren dándole un guiño y siguiendo su camino.

-Que sepas que lo recordaré. - Amenazó Jesus, señalándola, mientras agarraba a Apolo, que le rozaba las piernas, en su regazo. - Y Apolo será mi testigo ... i¿Ves chico?! i¿Qué me hace ella?! - habló acercándose al gato su cara.

-iVamos, Jesus! Llamaré un taxi por ti. - Gritó desde su habitación Lauren, mientras se cambiaba de ropa.

-Está bien ... no hay forma, ¿verdad? Siempre seré rechazado ipero recuerda! Me vengaré.- Dijo Jesus con voz amenazante, mientras colocaba a Apolo en el suelo y se ponía los zapatos, preparándose para irse. - Nunca volveré. - Terminó dramático.

-Ok ... ok ... El jueves vamos al cine, ¿no? - preguntó Lauren, aún desde la habitación.

-Sí al mismo tiempo, y compras las entradas.- respondió Jesus saliendo puntualmente, dejando a Lauren riendo sola en la habitación.

Estaba acostumbrado a pasar algunas noches en el departamento de Lauren, durmiendo en la habitación de invitados, tanto que ya tenía copia de la llave y libre acceso al lugar, pero siempre que podía, ella lo "echaba a patadas". Por mucho que disfrutara de la compañía del chico, se sentía mejor a solas con sus pensamientos, era y siempre sería una loba solitaria y en su mente eso nunca cambiaría.

Cuando se estaba preparando para ir a la cama, Lauren notó un mensaje en su celular, era de Lili invitándola a desayunar juntas al día siguiente y diciendo que la extrañaba. "iExtrañando a alguien! pfff" pensó con desdén Lauren, eso era tan distante y vago para ella, creo que la única persona que alguna vez extrañó en la vida fue su hermano pequeño, aún así no fue algo insoportable, fue nostálgico y pasó rápidamente. Leer esas cosas escritas por Lili fue al menos divertido. Lauren respondió al mensaje con la confirmación de aceptación de la invitación y dando un seco "buenas noches", fue lo máximo que pudo hacer por esa persona.