Cinco Hargreeves.
Maldita sea, de nuevo estábamos metidos en serios problemas, ¿es que acaso no pudimos lograr nuestro objetivo esta vez? Sin duda en esta familia abundaba la mala suerte. Todos mirábamos perplejos a Ben, quien habíamos dado por muerto hace tantos años, pero ahora yacía frente nuestro.
—¿Y ustedes son...? —preguntó, alzando una de sus cejas.
Nadie pudo articular una sola palabra, ni siquiera emitimos algún sonido ya que nada salía de nuestras bocas. Nuestras mentes estaban en blanco, es que el impacto del asunto no cesaba de ninguna manera por más que quisiéramos.
—Eso vamos averiguarlo, número seis —informó nuestro padre, o al menos mis hermanos y yo así lo seguíamos viendo.
Él se acercó a nosotros, nos observó de manera curiosa y a la vez analítica. Tal vez pensando que podríamos ser seres con habilidades, miró a Ben y aliso su saco.
—Vamos todos a la sala de entrenamientos —ordenó —. ¡Grace!
Gritó, en ese instante entró mamá a la habitación, lucía igual que en nuestra época. Irradiaba elegancia y portaba una gran sonrisa en su rostro.
—¿Qué sucede? —preguntó, mirando hacia nuestro padre.
—Encárgate de qué todos se reúnan a la sala de entrenamiento, infórmale a Pogo y lleven a los nuevos ahí —volvió a ordenar —. También quiero que esté presente número siete.
Mamá asintió y se giró hacia nosotros, pude notar el brillo en los ojos de Diego por un momento.
—Síganme, por favor —comenzó a caminar y todos la seguimos.
Al llegar a la sala, nos paramos en una línea recta, quedando de frente hacia los integrantes de la academia Sparrow. Ben sonreía en modo de superioridad, los demás nos miraban alerta, como si supieran que en algún momento podríamos hacer algo.
Papá entró, detrás de él venían mamá y Pogo, pero la atención de todos se posó en una chica de cabello castaño y mirada curiosa. Mi asombro fue evidente al notar que aparentábamos la misma edad, mientras los demás se veían como adultos, esa chica al igual que yo parecíamos adolescente.
La chica se paró a un lado de Ben, sus ojos analizaron a mis hermanos, después su mirada de posó en mí por unos segundos y note el asombro en sus ojos. Después siguió su recorrido, terminando con Vanya, quien le dedicó una pequeña sonrisa.
—Muy bien, si ustedes se dicen llamar la academia Umbrella e insisten que este es su hogar, pues también podrían demostrar que portan habilidades —dijo papá, mirándonos de manera seria —. Tal vez podrían mostrarnos lo que pueden hacer.
Nos miramos entre sí, debatiendo si era buena idea, pero en ese momento tendríamos que hacerlo o podíamos ocasionar algo grande. Además, era la única manera de que tal vez podíamos conseguir quedarnos aquí, en lo que buscábamos una solución y la manera de volver a nuestro verdadero hogar.
—Por supuesto, solo quiero saber si mis hermanos están de acuerdo —habló Luther, esperando nuestra aprobación. Todos asentimos, así que Luther fue el primero en dar un paso enfrente y en presentarse.
—Soy número uno, aunque me llaman Luther —comenzó —. Mi habilidad es la súper fuerza. Diego fue el siguiente en pasar.
—Soy número dos, me llaman Diego y mi habilidad es lanzar cuchillos y manipularlos para que caigan en el lugar que quiero.
—Soy número tres, díganme Alisson. Puedo manipular las palabras o acciones de una persona.
—Soy número cuatro, llámenme Klaus, puedo ver e invocar a los muertos.
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Secretos (Cinco y T/N) ✅
FanfictionDespués de volver a su época, los hermanos Hargreeves se enfrentan a un nuevo desafío. Al parecer han llegado al que sin duda era su hogar, pero por obra del destino eso es totalmente diferente. Tendrán que buscar la manera de volver a su época corr...