Era 10 de Febrero y estaba muy contento pues era mi cumpleaños. Había invitado a Iván, Zain y al Diego, también a mi mamá, pero no sabría si ella podría venir. A mi madre no la había visto mucho el año pasado, pero no lo noté tanto ya que hubo otros problemas que me mantuvieron distraído, aún así, la echaba de menos y deseaba con todas mis fuerzas verla ese día. Al levantarme, me bañé y me puse ropa, luego desayuné con mi padre y fuimos a comprar algunas cosas como bebida, papas fritas, Doritos y algunos globos. Si bien la fiesta no sería grande, quería que fuera bonita, así que me esforcé en que todo quedara limpio y ordenado. Después de almorzar, el Diego fue el primero en llegar. Lo saludé con un abrazo y dejé el regalo encima del sillón.
-Hola Cazuela.
-Hace tiempo no me dices así.- Sonrió y puso su mano alrededor de mis hombros.- Hola tío Lucho.
-Hola Diego, ¿viniste solo?..
-No, vino mi mamá también.
-Ah.. ¿Y dónde está?.
-Tuvo que irse, tenía que hacer unos trámites, pero le mandó saludos.
-Ah.. Le mando saludos también. ¿Cómo ha estado tu abuelita?.
-Bien, el otro día hizo pastel de choclo.
-Que rico, ¿no les quedó un poquito?.
-JAJDJAJ, no, perdón. ¿Sabe que me comí dos platos?.
-Chaaa, estai' weno pa' comer, el Pipe come lo justo no ma'.
-Si he cachado, lo voy a obligar a comer cuando vaya pa' la casa.
-Ya, yo voy a servirle más.
-JAJJDJA, bueno.
-Si quieren algo me dicen, voy a ir a la cocina.- Mi padre sonrió y se retiró.
-¿Así que estai' flaquito?.- El rubio acarició mi cabello.
-N..No, al menos yo no creo que esté flaco..- Mis mejillas se pusieron rojas.
-Sé que no eri' tan bueno pa' comer, pero come lo suficiente, ¿ya?.- Me dió un besito en las manos.- Te quiero.
-Jeje, yo también.- Lo abracé por un rato hasta que tocaron la puerta.- Oh, ya vuelvo.
-Deben ser Zain e Iván, aunque estaban enojados, ¿cierto?.
-Si, pero ya se les debió haber pasado.- Abrí la puerta y me encontré a ambos con una sonrisa.
-Feliz cumpleaños Pipe.- El chico de ojos miel me pasó un regalo cuidadosamente envuelto.
-Feliz cumple.- Zain me pasó un regalo un poco más desordenado, tenía cinta adhesiva por todos lados, pero aún así se notaba que se había esforzado para que quedara bien.
-Gracias.- Sonreí y dejé los regalos en el sillón.- Pasen, está el Diego.
-¡Hola!.- El rubio se acercó.- ¿Ya no están enojados?.
-No, de hecho, nos arreglamos hoy en la mañana.- Iván rió con suavidad.- Al final era una tontera, ya conversamos todo, ¿cierto?.- El castaño asintió con la cabeza.
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Tu mejor amigo.
Подростковая литература"El Pipe y el Diego llevan siendo amigos desde hace mucho tiempo, sin embargo, la llegada de un nuevo estudiante hará que las cosas cambien completamente, agregando que la llegada de la adolescencia sólo les traerá más problemas de los que pueden ma...