Capítulo 27

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Niall

Ya habían pasado dos días completos desde que habían encontrado el cuerpo de la niña en los baños, al parecer se llamaba Lilly Wals y era alumna de segundo año de Revenclaw.

Las últimas cuarenta y ocho horas habían sido las peores en la vida de Niall. Las clases se habían suspendido por duelo el dia anterior y hoy volverían a empezar, aunque nadie tenía demasiado ánimo para hacer nada en realidad, en el ambienten se podía sentir la tensión, la tristeza y el terror.

Esto no era como lo que había pasado con Miles, y no solo porque era la segunda vez que pasaba, sino también porque había ocurrido dentro del colegio, dentro de Hogwarts, el lugar más seguro del mundo.

Con Miles nadie había sabido la causa de la muerte del niño, solo los profesores y sus amigos ya que Louis se los había contado, había sido asesinado con un avada kedavra, el peor maleficio imperdonable que existía. Pero con Lilly todo el mundo se había enterado ya que en las clases de quinto, sexto y séptimo año de ese dia dieron una explicación demasiado detallada de lo que era ese hechizo y como a partir de ahora deberían intentar no estar solos en los pasillos ni en ningún lado de ser posible.

Niall no podía evitar pensar que eso tenía una relación con el asunto de Miles, y al parecer sus amigos tampoco. Maya estaba demasiado afectada, ya casi no les hablaba y se mostraba triste, ver a esa niña así la había afectado más que a todos los demás. Harry parecía triste y de mal humor todo el tiempo, Niall sabía que él y Louis habían discutido, pero allí había algo más, aunque no supiera que. Louis apenas había dormido y se notaba de sobra, tenía las ojeras marcadas y estaba nervioso todo el tiempo, Niall lo entendió, todos los recuerdos debieron haber vuelto de golpe al ver a la niña. Y en cuanto a él y a sus otros amigos, simplemente intentaban mantenerse lo más tranquilos posibles para ayudar a esos tres que de verdad no se veían para nada bien.

Niall no mentiría, él también estaba afectado, la imagen de ese dia no se iría de su mente nunca, apenas si lo dejaba dormir. Pero decidió que esta vez él debía ser el fuerte, era una especie de pacto silencioso que él y Shawn habían hecho, ellos serían fuertes por sus amigos, ya que Harry y Maya no podían hacerlo como siempre.

En ese momento se encontraban en el gran comedor, al igual que todos los lugares del castillo en los últimos días, este se encontraba más silencioso de lo normal, más apagado. Niall estaba sentado en la mesa de Hufflepuff con Maya y Harry, pero sus amigos apenas hablaban, solo se dedicaban a jugar con su comida y comer algunos bocados de vez en cuando.

Niall pensaba que tendría que decir algo, pero ya estaba en un punto donde le incomodaba empezar siempre las conversaciones porque sentía que era molesto, aunque eso nunca le había pasado antes. Pero gracias al cielo no tuvo que decir nada, porque en ese momento por las ventanas del gran comedor entraron al igual que todos los mediodías miles de lechuzas que traían cartas y paquetes de las familias para los alumnos. Una hermosa lechuza completamente negra dejo una carta justo al lado de Harry y este le dio unas migajas de su desayuno, Niall reconoció al ave enseguida, era Noctis, la lechuza de Gemma.

Harry leyó la carta en silencio mientras él y Maya lo miraban expectantes. Su amigo se puso un poco nervioso a medida que leía las palabras, pero intento ocultarlo, solo que no muy bien. Cuando termino, Harry guardo la carta otra vez en el sobre y siguió jugando con su desayuno, sin decir ni una palabra.

-¿Qué dice Gemma? –pregunto Niall curioso, no solo porque lo quería saber, sino también para tener algo de qué hablar.

-Nada importante, solo quiere saber cómo estoy yo, mama y ustedes. Vendrá para mi cumpleaños –Harry dijo todo eso un poco nervioso, pasándose una mano por los rizos, por lo que Niall supo que mentía, pero no quiso mencionarlo, si su amigo no quería decirle debía ser porque era algo personal.

The darkest hours [L.S]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora