DIECISIETE

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  • Dedicado a Daniel Mendez Contreras
                                    

Narrado por Daniel:

Esta noche estaba extremadamente tranquila, había un par de asistentes con turno de noche y Matías ya había sido enviado al exterior para su cacería. Me perturba un poco pensar en el.

Odio el hecho de que tengamos aun el deber de ir a buscar gente en la niebla y que su final en manos de mi amigo no sea el mejor de todos. Me quedé ésta noche para terminar con el papeleo de los informes que mandé a hacer. Detesto las formalidades y gastar papel, pero estaba demasiado encolerizado como para hacer un focus group para estudiar que pasó en la primera terapia. A veces pienso:

 ¿Es tan necesaria Valentina en el proyecto para hacer un cambio en Matt? Digo, no he hablado con el en mucho tiempo y podría hacer algo como intentar comunicarme con el, pero luego recuerdo a esos paramédicos cuando Matías perdió el control y el recordar el sonido de sus cuellos quebrados produjo un desagradable escalofrío y piel de gallina.

Por otra parte, la llegada de la chica despertó algo en mí que estaba apagado hace años. ¿Cariño? ¿Aprecio? Claro, es lo más esperable, pero lo que no se deben de esperar es que todavía se oculta un amor escondido, ermitaño que como el ave fénix, renació desde las cenizas. Pero, ¿Y Matías? que pasa con el, después de tanto tiempo, en teoría sigue siendo su novia. ¿O no?

Lo que es claro en ese asunto es que quiero a Vale, y mucho, y para mi desgracia no como amigo. Y debo cambiar aquello ahora.

Volviendo al asunto de Matt y lo peligroso que puede resultar ser, en mi cabeza atraviesa el recuerdo de la chica inmovilizada y Matt electrocutado en el piso. Lo que pasó horas después fue increíble. En sus espasmos luego de recuperar la conciencia, el shock  post traumático hizo que pudiese hablar.

Fuego, corre, sálvala.

No tengo ni la menor idea a que se refiere con todo eso, pero ojala podamos descubrirlo en poco tiempo.

Eso era todo lo que podía decir sin embargo no deja de ser increíble esta evolución en el.

-¡Doctor Contreras!

 Jaime Zandaya, uno de los  encargados de la llegada de Matías cada vez que vuelve del exterior, interrumpe mis divagaciones en el despacho.

-Dime Zandaya.

-D-12 ha llegado a la sala de purificación, ¿Le administramos la Cendriolanela?

 La Cendriolanela es uno de los nuevos medicamentos que estamos preparando. Es un barbitúrico parecido a la cristalenia en una versión más concentrada con aditivos para larga duración sacados de la Necrotamina. Aun no conocemos los efectos adversos a largo plazo pero, en las pruebas hechas no se encontraron efectos secundarios más que cambios en la queratina, produciendo en cabello y uñas un tinte de color azul intenso.

 Luego de comprobar que estos efectos eran solo físicos, valdría la pena probarlo en Matt.

 -Si, administren Cendriolanela al paciente.

 -De acuerdo doctor. También venía por otra cosa.- El hombre logró llamar mi atención, ¿Qué mas querría?- D-12 no llego solo a Sub Terra, trajo a un chico con el, creo que sigue con vida.

 La impresión invade mi ser. El último Condenado del Karma había sido Valentina, y desde ahí se auguraba que no llegase nadie más en un buen tiempo.

Digo, antes de la chica no llegaban personas (Vivas) a la ciudad hace más de 6 meses.

La noche había avanzado rápido, ya eran más de las 4 AM según mi reloj digital. Con la noticia me pongo de pie automáticamente y nos dirigimos a la sala de purificación o llegada de condenados del karma.

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