Huesos de un Muerto©

🔮Capítulo 34🔮

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Drakon:

La ira me nubla el juicio en milésimas de segundos.

- ¡ESTOY ESPERANDO UNA MALDITA RESPUESTA!

Calem y Laney se separan como si tuvieran la peste y alejan sus labios del otro automáticamente.

Mor se queda tan tiesa que ni se si está respirando al lado del lavabo.

- Drakon...yo -Laney palidece mortalmente-, no es lo que piensas...yo...

Mis alas se comienzan a expandir haciendo que los dientes de Laney castañeen, pero las controlo, a pesar de que igual me perforan la piel, antes de volver a ocultarse.

- Drakon, cálmate.

- ¡El problema no es contigo, Morrigan! -empiezo a hervir en rabia-. ¡No te metas!

Calem pasa saliva.

- ¡Dame una maldita respuesta ahora, Calem!

Palidece aún más que mi hermana menor.

- Estamos juntos desde hace mucho tiempo, Drakon -siento como se me cae el mundo-. Lo siento, yo...

Dos zancadas me demoró en derribarlo al suelo con un golpe sordo. Alguien saca a Laney de aquí, mientras no sé qué me chilla, y de la nada todos son gritos a mi alrededor cuando comienzo a hacer mierda a Calem a golpes.

- ¡Te advertí que si te acercabas a mi hermana la ibas a pagar caro, Calem! -los ojos se me llenan de lágrimas-. ¡CONFIÉ EN TI, HIJO DE PUTA! ¡CONFIE LA SEGURIDAD DE MI HERMANA EN TI! ¡TE HE DADO TODO AL ABRIRTE LAS PUERTAS DE MI CASA Y DE MI FAMILIA! -lo levanto con fuerza dándole vuelta y derribando su cuerpo sobre la mesa-: ¿Y ASÍ ME PAGAS? ¡¿Metiéndote con mi hermana menor?!

- ¡Yo no quería esto! -grita derramando un par de lágrimas-. ¡Eres prácticamente mi mejor amigo, jamás quise traicionarte! Es solo que...

- ¡¿Es solo qué?!

Sus ojos casi grises se cristalizan aún más.

- Es solo que me enamoré de Laney.

Retrocedo al instante, con el alma casi hecha pedazos. Me detengo en seco cuando mi novia se pone entre los dos

- Mor, no te metas - me duele hablar.

- No.

- Mor.

- Dije que no -mira mis manos preocupada-. Solo basta, ya no más.

- ¡Muévete!

- ¡Dije que no! -se niega a hacerse aún lado cuando intento avanzar-. ¡Escúchalos! ¡Tienen más que decir de lo que crees!

No voy a conseguir nada aquí.

Miro a Laney a través de los hombros de Mor más decepcionado que nunca.

- Lo único que quería en esta vida, era que algún día crecieras y vieras el mundo más allá de lo que yo te podía ofrecer -mis ojos arden más que nunca-. Y que no cometieras los mismos errores que mamá -cambio mi mirada hacia Calem-, al enamorarte de alguien como él.