🔮Capítulo 1🔮

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En Londres siempre han pasado las cosas más extrañas, o, mejor dicho, en lo que radica mi instituto, siempre han pasado cosas extrañas, desde; secuestros hasta asesinatos, —algo que enserio es bastante curioso para una sociedad educativa—, pero con lo que nadie ha contaba, es que yo siempre he sabido quienes son los asesinos, secuestradores y la mierda mala en este mundo.

Es lo bueno de poder controlar las mentes. Algo bueno tiene.

Pero a pesar de todo, no me considero una mala persona, ni alguien común y corriente.

Porque ser común no me nace.

Y, al contrario de la justicia policial, —que espera no sé qué para encarcelar y quitar a esos parásitos que hacen daño, prefiriendo quedarse de brazos cruzados, como los inútiles que son, antes que hacer algo—, yo si se cobrar la justicia cuando es merecida. Cada persona dañina que ha pisado mi escuela ha terminado muerto, por la sencilla razón de que yo fui creada con el propósito de ir limpiando un poco el mundo.

Y ese propósito me lo inculcó la oscuridad.

Las personas en Londres y en cada parte del mundo, no eran buenas, y algunos piensan entre susurros al ver todo lo que pasan por las noticias: ¿Cómo un adolescente puede ser un asesino o hacerle daño a alguien?

La respuesta es bastante fácil, y esa es: Somos una sociedad que corresponde violencia con violencia, y los jóvenes de hoy en día, en vez de hacerle algo bueno al mundo, prefieren seguir sus instintos primitivos y seguir el juego macabro, de una vida contaminada.

Se que pensaran que estoy loca, pero la verdad me da lo mismo, cada gota de sangre que han derramado los inocentes vale lo que implica mi "locura", yo soy su justiciera o bueno si se puede llamar así, por algo fui hecha, y si es necesario que el precio sea que mi alma se llene de oscuridad y que me gane el desprecio de los demás, para lograr establecer la verdadera justicia, será así, porque yo no dejo que la corrupción gane en mi vida.

Eso sí que no.

Entonces, aquí comienza mí historia.

Me mantengo de pie en la acera, de la prestigiosa escuela en la cual estudio, -que cabe destacar que lo único prestigioso que tiene es la excelencia académica porque la convivencia escolar en donde las clases sociales prevalecen, se deja pasar que gente muera como si fuera pan de cada día, porque aquí todos son responsables-, por eso tengo todo el derecho de decir que: Este instituto es un desastre social.

Un chico algo rubio se mantiene en la última torre del edificio, dejando en claro que está a un paso de caer en una maravillosa y algo sangrienta; caída libre. Las puertas del instituto se mantienen cerradas, porque ni siquiera es la hora de entrar a clases, y el conserje con lo preocupado y nervioso que esta, no logra abrir las puertas.

Digamos que me gusta jugar con la mente de los demás, a veces sin hacer daño, y su nerviosismo es gracias a mí.

Lo sé.

Soy una chica bastante genial.

— ¡Baja de ahí! — grita el director desesperado.

Resumiré esta escena:

El maldito desgraciado, que está a punto de caer, ha cometido cinco asesinatos en lo que lleva de año.

Sí, lo que lleva de año.

Ha matado para liberar su frustración de gigoló herido, por la cual las cinco chicas muertas lo rechazaran de una manera un tanto cruel. Ha mentido descaradamente y llorado en cada uno de sus funerales, como el cínico de mierda que es.

Huesos de un Muerto©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora