Cap 11. Tras la cita

28 8 0
                                    

Seguíamos sentados bajo aquel árbol, viendo las estrellas, parecía que el tiempo se detenía a su lado, no era la primera vez que estaba con un chico, pero para ser nuestra primera cita, o la primera vez que quedamos para conocernos, me sentía demasiado a gusto y no es algo normal en mí. Me giro y observo el perfil de mi acompañante, nunca lo había podido ver, es incluso más guapo de lo que podía haber imaginado solo viendo sus fotos. Sigo sin poder retirar mi mirada de su rostro.

Tae: ¿Tengo algo en la cara? -Me mira con una sonrisa socarrona, levanta una de sus manos y me da un capirotazo en la nariz. Al instante me ruborizo y aparto la mirada del chico, me ha pillado mirándole ensimismada por su belleza, propia de un dios griego, ¿Cómo se suponía que le tenía que volver a mirar a la cara?

Tu: No, lo siento si te he incomodado. -Digo, aunque todavía no levanto la mirada del césped.

Tae: No, tranquila, en verdad me ha parecido tierno. -La rojez de mi cara incrementa, me la tapo como acto reflejo con las manos, tengo que hacer algo para que no se haga ilusiones.

Tu: Pues no te acostumbres, no soy nada tierna.

Tae: Al menos me lo podrías decir mirándome a la cara. -Niego con la cabeza, si levanto la mirada se va a dar cuenta de lo roja que estoy.

Tae: ¿Cómo que no? -El chico se arrastra hasta estar en frente mío, y coge con sus dos manos mi cara, obligándome así a mirarlo. Su mirada se pierde en la mía, me suelta la cara dejando con una de sus manos una suave caricia en mi mejilla.

Tae: No era tan difícil mírame ¿No?

Tu: Lo difícil es intentar no hacerlo. -Ahora el que se pone rojo es él, e intenta bajar la mirada y esconder su cara entre su pelo, pero imitándole cojo su cara entre mis manos y le obligo a mirarme.

Tu: Ahora el que no me podías mirar eras tu. -El chico se ríe, ahora la que se pierde en su mirada soy yo, tiene una sonrisa preciosa, pero apenas le conozco. Taehyung no me quita los ojos de encima, y me doy cuenta de que sigo teniendo mis manos en su cara, las aparto bruscamente.

Tae: Tuche, jajajaja.

Tu: Jajajajajaj. -Los dos compartimos risas, hasta que uno de sus guardaespaldas sube la colina.

G1: Señorito Kim, tenemos que irnos enseguida, la sasaeng acaba de salir del museo y viene para acá, lo acaban de ver los que se han quedado en la puerta.

Tae: Vale, nos vamos.

Tu: Si, pero ¿Qué es un sasaeng?

Tae: Es como un paparazzi, pero acosador, es un término algo difícil de explicar. -El chico se levanta y sacude sus pantalones y abrigo, y me ofrece su mano para ayudarme. La tomo y me levanto, empezaba a hacer frio, serían las 8 pasadas, y era de noche. El frío del otoño empezaba a notarse, y yo queriendo ir guapa iba en falda y suéter, el coche estaba un poco alejado, habíamos salido por una puerta diferente y ahora tocaba dar una vuelta para encontrarlo, pero tampoco me iba a quejar.

Tae: ¿Tienes frío? El coche esta bastante lejos. -Dice mientras se pone la mascarilla, el gorro y las gafas de nuevo.

Tu: Si, pero no pasa nada, estoy bien.

Tae: Toma. -Se quita el abrigo y me lo da, pero no lo cojo.

Tu: No, tú también tendrás frío, no lo necesito de verdad. -Hace oídos sordos y me pone el abrigo por encima a modo de capa, sus brazos están sobre mis hombros, casi era un abrazo camuflado de caballerosidad. Ahora ya no era solo la ilusión de la camiseta negra bajo el largo abrigo marrón, ahora todos los músculos de su cuerpo se podían apreciar, llevaba la camisera metida dentro del pantalón de tiro alto, y aunque no quería mirar mi vista no podía no desviarse.

Inesperadamente tú [KTH]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora