PTV Tae:
*7 minutos antes del desastre*
T/N: ¿De quién? -No se como narices decirle que me gusta ella, así a la cara, no me atrevo, se me ocurre enseñarla que es ella en el espejo, asique me levanto del sofá y ella me sigue, la tapo los ojos y la llevo hasta el espejo del pasillo, una vez allí la señalo.
Tae: De ella. -Se queda callada, esto ha ido peor de lo que esperaba, tenía que haber esperado más, nos conocemos desde hace casi dos meses, pero es muy poco aún. Se gira, pero no puedo mirarla a la cara, la vergüenza que siento es superior a cualquier otra cosa que haya sentido nunca.
T/N: Ultima pregunta, pregúntame, pero mírame a la cara por favor. -Tengo miedo, no se que se supone que la tengo que preguntar, si ella siente lo mismo, si ella no siente lo mismo, si tiene tantas ganas de besarme como yo a ella.
Tae: Yo, lo siento, no te quería incomodar, voy a llamar a alguien para que te lleve a casa, lo siento. -Mi miedo habla por mí, no le quiero preguntar nada, no puedo hacerlo, estoy demasiado nervioso.
T/N: ¡No! Pregúntame lo que quieras. -Ella me sigue insistiendo, me empiezan a sudar las manos y sigo siendo incapaz de mirarla, y eso que es guapísima, pero no puedo.
Tae: ¿Qué es lo que quieres hacer ahora? -Si me dice que se quiere quedar habrá que hablar del tema, si se quiere ir llamaré a alguien para que la lleve a casa.
T/N: Varias cosas, la primera que me mires. -Le hago caso y levanto mi cabeza, veo que no tiene expresión de estar enfadada y que se empieza a poner roja, hay una pequeña posibilidad de que yo también le interese a ella. -Vale, la segunda es que no llames a nadie, no quiero irme a casa, y la tercera no te la voy a decir porque me da demasiada vergüenza. -Ahora es ella la que me quita la mirada, pero me niego a quedarme sin ver esos ojos, quiero besarla, cada vez más, antes casi lo hago en la cocina, pero me he arrepentido, siempre que estamos a punto de besarnos me arrepiento y me aparto. La tomo por la barbilla y la obligo a mantener contacto visual conmigo, quiero que me diga lo que quiero oír.
Tae: Dime la tercera, solo me quiero asegurar. -Digo susurrando, nuestros labios casi pueden rozarse, y lo harían al escuchar sus palabras.
T/N: Bésame. -No me lo pienso ni dos veces antes de abalanzarme sobre su boca, llevaba mucho tiempo deseando hacerlo, besarla, pero se me va de las manos, la tiro en la cama y estoy a punto de quitarle la ropa, me apretaba el pantalón, y no pensaba con claridad. Mis manos empiezan a moverse solas intentando buscar un pliegue por donde colarse para tocar su piel. De repente un escalofrío recorré mi piel, intento separarme lo más delicadamente que pueda de ella, pero me mira a la cara, mis ojos se llenan de lágrimas por la rabia de no saber contenerme las ganas y no puedo creer que haya llegado hasta ese punto solo por un beso.
T/N: ¿Qué pasa? ¿Tan mal beso?
Tae: Lo siento, lo siento mucho T/N. -No puedo decir nada más, ella sale corriendo de la habitación, la veo como recoge sus cosas y se va a ir, salgo corriendo detrás de ella, le agarro por el antebrazo y ella se intenta zafar de mi agarre.
Tae: Hey, ¿Qué te pasa?
T/N: Taehyung déjalo, se ve que ha sido un error para ti.
Tae: No, solo, lo siento ¿Vale?
T/N: No tienes que sentir nada, no quiero ser el remplazo de nadie, no quiero que te arrepientas de haberme besado porque yo no me arrepiento ni me voy a arrepentir de haberlo hecho.
Tae: No me arrepiento, solo me ha asustado. -Se que va a decir algo, pero la corto antes de que pueda decir nada, la suelto el brazo y la giro por los hombros para que quede mirándome. -Me ha asustado que no me haya temblado el pulso al llevarte a la cama, me ha asustado que tu no me has dicho que no. No se que quieres de mí, no se lo que sientes por mí, se que te he dicho que me estaba empezando a enamorar de ti y que tu solo me has dicho que te bese, no se que quieres tú, pero yo no quiero que esto sea solo un lio de una noche. -Miro la cara de la chica, esta llorando, tiembla y se intenta limpiar las lágrimas como puede con sus mangas.
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Inesperadamente tú [KTH]
FanfictionEntendí que tu amor era como un tren que solo pasaba por mi estación una vez, y que tenía dos estaciones finales posibles, dependiendo de los desvíos que nos diese la vida. Y al no dudar ni un segundo si montarme en ese tren entendí que eras tú. In...