I'm yours, Alfa. (Ziam)

epílogo.

- ¡Naím, eso era mío! - chilló el pequeño moreno intentando quitarle los dulces que éste le había arrebatado.

- ¡No seas lloron, Hassan!

- ¡Papá me los compro para mí! - hizo un puchero.

- bueno, pero como soy tu hermano debes compartir conmigo. - se llevó una de las gomitas a la boca.

- ¡Papá! ¡Naím sigue comiendo mis dulces! - chilló el Omega a punto de largarse a llorar.

El pequeño alfa castaño rodó los ojos y antes de que su padre aparezca por la puerta se lo devolvió.

- Naím ¿Que te he dicho sobre robarle los dulces a tu hermano, Huh?

- papá, ¿Por qué le compras todo a él? ¿Estás haciendo diferencia? ¿Es eso? ¿Acaso ya no me amas más?

Soltando una risa el alfa revolvió el cabello del pequeño. - a veces creo que tienes un Omega interno, cariño. O tal vez será porque te juntas mucho con la diva de alfa que te toco como tío y si, me refiero a Harry.

La risita burlona del menor no se hizo esperar mientras que el mayor abría la boca indignado y ofendido.

- Liam, deja de ser tan idiota y ayudame con la pañalera. - la voz  dulce y ahora algo molesta lo hizo voltear para encontrarse con su hermoso Omega, quien tenía a su pequeña Karen en brazos.

- lo siento mí amor. - dijo para luego darle un beso a su esposo y tomar lo pedido.

- ¡Papi! ¡Quiero cargar a Kar! - dijo el pequeño azabache.

- está bien, mí vida, pero primero siéntate en el sofá, no quiero que se te caiga o te canses parado.

El morenito hizo lo pedido para luego estirar sus brazos en dirección a su padre y tomar a su hermanita de cinco meses y sentarla en su regazo.

Oh si, la familia se había extendido, después de haberse casado y Naím cumplió los dos años, Hassan llegó a sus vidas y ahora, seis años después, la pequeña Karen había sido un regalo inesperado, pero aún así la habían amado como a cada uno de sus hijos.

Naím era un precioso y protector Alfa, digno hijo de Payne, era su viva imagen, no había nada que el pequeño no haya heredado de su padre, y ahora, futuro líder.

Hassan Geoff, el líder se había muerto de amor en cuanto el Omega de su hijo le hizo saber que su pequeño llevaría su nombre. Era idéntico a Zayn, un hermoso, tierno y pequeño Omega, de tez morena y una personalidad combinada de ambos padres.

Y por último, la pequeña Karen, su nombre era en homenaje a su abuela. Era una bebé preciosa, una hermosa Omega quien sacó las cualidades de los dos, pero también los genes Malik habían ganado en la pequeña, las mismas facciones que su padre, hermosas pestañas, piel de un bronce perfecto.

Eran la prueba existencial de la perfección.

Zayn y Liam no podían estar más felices por la hermosa familia que habían formado.

Llevaban ocho hermosos años de casados y el amor que se profesaban seguía siendo igual de fuerte y sólido como la primera vez.

Lamentablemente, Geoff Payne no pudo llegar a conocer a su última nieta, pues éste había enfermado y fallecido cuando Zayn estaba a tan solo cuatro meses de su embarazo. Liam asumió su liderato en la manada, siguiendo los pasos de su progenitor y dando, día a día, lo mejor para su gente, por lo que había decidido que todos tendrían voz y voto, el clan Tomlinson, ahora liderado por Styles, luego de que Louis fue reconocido por su gente y como era de esperarse que su Alfa era a quien le correspondía tomar el lugar, se habían aliado con el clan Payne y así como otros clanes, como el Mendes, Bieber, Devine, Clifford y Hood. Los desacuerdos se habían disipado, todo era de todos, Liam se había encargado de hacer tratados de paz y cada clan había aceptado pacíficamente. Zayn estaba más que orgulloso por su Alfa. Él estaba haciendo historia y educando a sus hijos para que cuando estos llegarán a la adultez, tuvieran un mundo mejor en donde vivir.