I'm yours, Alfa. (Ziam)

treinta y dos.

Unos golpes seguidos en su puerta hicieron que el alfa gruñiera mientras despertaba. Sintió un calorcito agradable en su pecho y se dió cuenta de que aquel calor provenía del pequeño Omega que descansaba sobre él, acurrucado como un koala a su cuerpo, sonrió inevitablemente, pero aún así, no tardó en sentir el dulce aroma que llenaba la habitación, tocando la piel suave y delicada de su pequeño, se dio cuenta de que está ardía como nunca.

- ¡Liam! ¡Ábreme la jodida puerta! - la voz gruesa y rasposa de Harry lo hizo gruñir, en cuanto la puerta fue abierta sin aviso y el rizado se hizo lugar en la habitación, su alfa se puso posesivo, no quería que nadie se acercará a su Omega en el estado en que este estaba en el momento.

- ¿Li? - murmuró, a lo bajo. - Liam..

- mío. - gruño aún sin perderle la vista al ojiverde.

- uh.. yo, lo siento yo...

- ¡Largo! - gruño, apretando más al omega entre sus brazos.

- mierda... Hablaremos luego... Idiota. - dijo Harry antes de salir corriendo sin darle tiempo a Liam para que lo ataque.

- Liam.. - volvió a jadear el ojiavellana, enterrando su rostro en él cuello de su alfa.

- estoy aquí, mí amor.

- ah... Li. - sin que el castaño pudiera reaccionar, ya tenía al moreno encima suyo, como si éste estuviera poseído, frotando su culo en su miembro y besando su mandíbula.

- Zayn..

- Liam... Te necesito, te quiero dentro mío, por favor...

- espera, bebé. - intentó tomar las manos del azabache pero éste, golpeó sus manos con rapidez y volvió a tomarlo del rostro. - zaynie..

- Li - lloriqueó otra vez, atacando sus labios de nuevo, las feromonas que estaba desprendiendo el moreno estaban enloqueciendo al alfa, quería tomarlo allí de una vez por todas y sasear sus ganas y bajar su temperatura, pero no habian pasado muchas horas las cuales habían tenido relaciones, no quería dañar a su Omega.

- Zayn, esperemos. - intento negociar. - si tú... Mierda. - gruño cuando el Omega apretó su duro miembro por encima de la tela de las sábanas.

- Alfa... Te necesito, te quiero dentro de mí.

Y a la mierda todo tipo de compasión que Liam estaba guardando.

Capturando los labios del menor, lo giro sobre la cama, poniéndolo debajo de su cuerpo, el moreno ronroneaba gustoso ante el descaro de su alfa al pasar sus manos por su cuerpo.

No tenían nada que detuviera que sus cuerpos de rocen, la perlada y suave piel del Omega, que hervía por el celo que había iniciado, se tocaba con la piel de su alfa, lo que le hacía gemir al sentir el tacto que tanto necesitaba, aunque el quería más, mucho más.

Su cuerpo empezó a prepararse para darle la bienvenida a su pareja y estaba cegandolo la lujuria que se esparcía por todo su ser.

Liam repartió besos desde sus labios, haciendose camino por su mandíbula, cuello, pecho y abdomen, hasta llegar a donde él quería, tomando el muslo del pequeño, pasó uno de sus dedos por la lubricada entrada, ganándose unos gemidos por parte del moreno, quien se retorcía en cada caricia que el le proporcionaba.

- ah.. Liam.. por favor.. - jadeó, los ojos oscuros del Omega se encontraron con los del alfa, el cual luchaba contra sí mismo para hacer las cosas lo más suaves posibles y no dañar a su amado en el proceso.

Aunque Zayn parecía no tener la misma idea que él, al sentir uno de los dedos de Liam en su entrada, no espero para empujarse contra el y que éste se metiese de un solo movimiento en su ser.

- ¡Ah! ¡Más! ¡Más, Liam! - pedía, lágrimas salían de sus ojos sin poder evitarlo, el celo estaba matándolo, necesitaba que su alfa le quitaste aquel calor insoportable y la sensación de estar vacío, el quería estar lleno, jodidamente lleno.

Introduciendo dos dedos más, Liam quería prepararlo lo más que su Omega se lo estaba permitiendo, pues éste lloriqueaba, jadeaba y gemía, rogando por algo más que solo sus dedos.

El castaño decidió que ya estaba malditamente listo para recibirlo, así que no dudó en subirse hasta llegar a la altura de los labios del moreno y alinear su longitud a la entrada del mismo, quiso hacerlo lento, quiso mantener la calma, seguir usando su parte racional y no el instinto animal que pedía a gritos salir del encierro en el que Liam lo había puesto y manejar la situación.

Pero, su Omega al sentir solo la punta del miembro del castaño, volvió a empujarse con todas sus fuerzas hacia éste y llenarse por completo, un grito de placer, acompañado de un gruñido se escucho por toda la habitación.

- joder.. Zayn..

- A-alfa... - balbuceó antes de que sus ojos se pusieran blancos al sentir las profundas y rápidas estocadas que su alfa le daba, se aferró a los fuertes hombros del ojimiel y disfruto del inmenso placer que estaba sintiendo, esto era todo lo que quería, sentirse lleno, que su alfa se encargará de satisfacerlo.

Zayn no podía recordar en un tiempo pasado, cuando fue que sintió algún tipo de placer. Solo sabe que supo lo que esto realmente era cuando estuvo entre los brazos de Liam Payne.

Su lobo chillaba eufórico, su compañero, su amor, su pareja destinada, estaba con él, justo a su lado, no solo velando sus necesidades, el realmente era quien cuidó de Zayn desde el minuto uno. Y zayn  lo amaba, mierda que lo amaba, lo amó desde el primer momento en que lo vió.

Lágrimas se escaparon de sus ojos, no solo por la alegría y lss olas de placer que recorrían su cuerpo, no, él lloraba por todo, por lo que le había tocado pasar, por la razón que lo había llevado hasta allí, por haberse enamorado el primero, por haber amado el primero y por ser el único de los dos que no podría vivir si el otro le falta, el lo sentía, no era estupido, dependía de Liam y esto le aterraba y gustaba al mismo tiempo.

Una fuerte y profunda estocada lo hizo gemir a todo pulmón mientras sentía como su semilla daba en el abdomen de su alfa y el suyo propio.

Minutos después, él castaño lo siguió volviendo a anudarse dentro de él.

Al terminar con la anudación, Liam se acostó, llevándoselo con el, haciendo que este se acurrucará en su pecho.

Zayn se sentía tan bien, tan satisfecho, tan bien cuidado, Liam se había resistido y no le habia dado solo sexo, Liam le hizo el amor. Eso es algo que Zayn se dio cuenta desde el primer momento y algo que el castaño tampoco negaría.

- mío, mí Omega. - dijo el ojimiel mientras hundía su nariz en el cuello de éste, haciendole soltar jadeos.

-mhm.... Soy tuyo, alfa.