En mi piel

Capítulo 45: Otra oportunidad.

Apago la televisión al terminar el reportaje, quisiera decir que me siento bien de que el Señor William irá a prisión, pero no es así, estoy preocupada por Alison y Arya. Quisiera saber si están bien, si Alison está involucrada de alguna forma con estos casos.

—¿Has sabido algo de ella? —Pregunta papá sentándose a mi lado. Lo miro por varios segundos para luego fingir indiferencia. —Está bien sentirte preocupada por ella, el amor no es algo que desvanece de la noche a la mañana.

—No estoy preocupada por ella.

—¿Entonces por qué te quedaste a ver el noticiero mientras te mordías las uñas?

—Es nor... —Me quedo callada al ver como alza una de sus cejas con incredulidad. —Bueno, sí estoy preocupada y la última vez que supe de ella fue hace trea días y le pedí que me dejara en paz.

—¿En paz?

—Me estuvo llamando, no hablaba pero hace tres días Arya me marcó buscando distraerse de una pelea entre sus padres, y cuando me marcó en la noche la mandé al infierno. —La expresión de papá era de disgusto, por lo que me quedé en silencio esperando a que diga algo.

—No sé que decirte respecto a eso. Las personas se merecen otra oportunidad, cariño. —Susurra pensativo. —Pero te recomiendo investigar para que puedas dormir tranquila hoy.

—Papá, ¿sabes algo? —Le pregunto confundida, él no diría eso a menos que estuviera al tanto de algo.

—Iré a dormir.

Tras un largo suspiro se levanta del sofá y luego de besarme en la frente se va a su habitación arrastrando los pies, lo veo irse así que decido llevarme de su recomendación. El número de Kayla está agendado como rubia psicótica y espero que no haya cambiado porque la última vez que hablamos tuvimos una discusión y creo que me bloqueó de todos los lados finalmente envío la llamada y le sorprende qud haya contestado al primer timbrado

—¿No tienes a quien más llamar? ¿Quieres discutir? Porque ahora no puedo. —suelto una ruidosa carcajada ante su manera de contestar lo cual la hace bufar. —Billie, no me jodas.

—No quiero pelear, solo te llamé para saber algo, ¿has hablado con, ya sabes quien?

—¿Con Lord Voldemort? —Bromea.

—Idiota.

—Puedes mencionar su nombre, no seas tóxica; y sí, sé algo, ¿vienes a mi departamento para hablar? —No es una pregunta, su tono es de autoridad. —Ahora.

—Está bien.

Media hora después me estaciono en el famoso edificio que tanto he visitado. Suelto un suspiro y subo al ascensor, tengo grabado los segundos que me toman llegar al piso asignado y cuantos pasos me toman llegar a ese departamento, pero voy al de Kayla, puede que sean unos pasos menos. Definitivamente son diez pasos menos, me detengo en la puerta y toco el timbre mas de una vez porque sé que le molesta eso.

La puerta se abre y no es precisamente Kayla quien abre. Quiero correr de aquí para no verla, creo que eso es una respuesta a mos preguntas, ella está y físicamente no está también.

—¿Billie? —Su voz está llena de ilusión al igual que sus ojos. —¿Viniste a veme?

—No. —murmuro cortante. —Vine a ver a Kayla, de haber sabido que ibas a estar aquí no habría venido.

Ella asiente cabizbaja. Eso sonó muy duro y me gustaría decir que no me hirió decirlo pero estaría mintiendo. Alison no parece estar bien, está delgada y tiene unas bolsas oscuras bajo sus ojos, su labios están quebrados, esa no es la Alison que conocí.