Niño Problemas [YoonMin]

Capítulo 12 (KookV)

Narra Taehyung

Era hora de receso, Jimin y Yoongi se estaban tardando en los vestidores.

¿Debería ir a buscarlos o darles tiempo a solas?

Sin pensarlo mucho más me levanté de mi escritorio con una sonrisa, decidido a ir a buscarlos y si tenía suerte, atraparlos in fraganti. Quería molestarlos un poco después de que me hayan dejado solo con sus helados tanto tiempo.

Caminé con pasos largos y rápidos, cubriéndome con la capucha de mi saco la cabeza, para evitar que las personas me miraran a la cara, totalmente absorto en el vago recuerdo del olor de hace unas horas y tratando de encontrar respuestas de lo que pudo haber sido.

¿Por qué recordaba eso justo ahora?

Con un lío en la cabeza tome un pequeño atajo entre pasillos desiertos para llegar más rápido a los vestidores donde se supone estaban Yoongi y Jiminie, pero algo detrás de la puerta del antiguo salón de música me dejó con la boca abierta.

Una melodiosa voz bailaba sobre mis oídos antes ensordecidos por la bulla de la gente. Esa voz era armónica, afinada, atrayente y sublime a mi alma.

Tocaba cada espacio de mi ser, no con las manos o con algún tipo de tacto físico, lo hacía acariciando mis sentidos como el suave susurro de las hojas del libro de poemas de Jimin cuando las pasa demasiado rápido o como los pequeños pasos que daba mi pequeña mascota cuando regresaba a casa.

Era un sentimiento, una sensación... que en realidad no podía explicarse sea con simples o complicadas palabras, y aún peor salidas de mi propia boca y mente.

Abrí la puerta del viejo salón de música y lo encontré, era ese mismo olor.

Dentro del salón estaba un joven de apariencia ruda, era alto y de gran semblante. Mi corazón se movía inquieto al saber quien era la persona con tan magnífica voz y tan glorioso olor. Él estaba sentado frente la ventana, pasando totalmente de mi presencia, parecía que estaba inmerso, concentrado en su propio canto y hundido en sus propios pensamientos.

Está tan cerca de mi pero su mente ya está volando en otro universo.

We can talk here on the floor
On the phone, if you prefer
I'll be here until you're okay
Let your words release your pain
You and I will share the weight
Growing stronger day by day

It's so dark outside tonight
Build a fire warm and bright
And the wind it howls and bites
Bite it back with all your might

La letra de Talk to me resonó en la habitación y me atravesó como una bala en medio de un prado pacífico, era la única canción que me daba esperanzas y me hacía sentir débil e insignificante al mismo tiempo. Después de todo siempre me hacía la misma pregunta: ¿Al final cuáles en realidad son las palabras correctas que uno se debe dedicar a sí mismo para lograr encaminarnos al amor propio?

¿Estaba yo a la altura de las palabras de esa canción?

Él parecía disfrutarlo, parecía que la canción le daba confort y que tal vez, estaba dándose auto-compasión.

El canto del chico misterioso paró de repente y eso tensó mis músculos.

—¿Quién eres y qué es lo que haces aquí?— cuestionó aquel muchacho con tono amenazante.

—Lo siento, no quería molestarte tu canto es muy hermoso y me dejé llevar— murmuré tratando de cubrir nuevamente mi cara con la capucha de mi saco.

—No lo sientas, solo no regreses más.

—¿Por qué?

—No seas entrometido.

—La curiosidad es una de las bases de la supervivencia humana ¿Acaso no lo sabes?— tonteé nervioso.

—Sé ve que eres listo, así que porque no te vas y me dejas solo de nuevo.

—¿Te gusta estar solo?

—Es lo mejor, me ayuda mucho.

—¿A qué?— pregunté interesado.

—A olvidar.

—¿El olvido será la verdadera solución?— pregunté preocupado.

Debía dejar de ser el reflejo de mi madre en estas situaciones.

Mis ojos viajaron hacía la mirada del chico, tenía una expresión tensa y triste, como si un dolor inexplicable se apoderara del momento. Su olor se volvió inestable y muy amenazante.

Pero, yo no estaba asustado.

Sus ojos enrojecieron como si fuera incapaz de poder soltar lágrimas, como si no quisiera mostrase débil ante mí. Apenas nos habíamos visto, pero solo bastó eso para rodearlo con mis brazos.

No esperaba nada, quería ayudarlo y darle paz por al menos un momento, no sabía que me había impulsado a darle un abrazo, tal vez si olor que trataba de hacerme escapar de él pero solo me hizo querer acercarme, o tal vez su mirada melancólica junto con sus pequeños sollozos.

Pude sentir claramente su olor, manzana, canela... y masa de galletas.

¿Él también lo está sintiendo?

Después de un tiempo lo solté y él se alejó rápidamente.

—¿Por qué hiciste eso? En serio eres de lo peor— fingió fuerza.

—Lo hice por impulso, solo entré para sentir más tu voz, cantas muy bien.

—Gracias, pero no debería importarte.

—Tal vez no... Pero quiero escucharte cantar de nuevo.

—Ni siquiera soy tan bueno ¿Por qué querrías hacerlo?

—Porque me da paz ¿Tú por qué cantas?

No respondió, solo bajo su mirada hacia mí y tomó mi mentón.

—¿Cómo te llamas?— pregunté.

—Jeon... Jeon Jungkook.

—Lindo nombre.

—¿Cuál es el tuyo?

—Lo dejaré a tu imaginación.

—Sabes que es muy fácil averiguar nombres en un colegio como este ¿No?

—Ush, al menos déjame desempeñar el papel de misterioso.

Dicho eso no esperé respuesta, simplemente me alejé y salí del salón rápido sin dar una mirada atrás. No debería ilusionarme, es agotadora la carga de una relación destinada, además de que él no había dicho si sintió mi tercer olor.

Es estresante, pero me interesaba, quería saber acerca de esa persona.

Jeon Jungkook... ¿Dónde había oído ese nombre?

Debería hundirme en la miseria o sería una historia diferente, nada se sabe hasta que se intenta. Pero en realidad no sé si tomar ese riesgo con él.

Complicado.

Hi soy yo uwu ♥️

Actualizo el capítulo 12 de Niño Problemas.
Si les gustó denle un voto al capítulo ♥️

La canción que canta Kook se llama Talk to me de Cavetown.

-Lina☺️✌️♥️