Bajo Los Encantos Del Ruso

CAPÍTULO 24

Capítulo 24

Irina se despertó por el insistente sonido de un teléfono, cerró los ojos con fuerza y se acurrucó más contra el pecho de Vladimir, quién al aparecer no sentía el sonido del teléfono y se encontraba completamente dormido a su lado, un suspiro salió de sus labios cuando el teléfono dejó de sonar, pero su ceño se arrugó al escuchar nuevamente el insistente sonido del teléfono.

Se sentó en la cama restregándose los ojos, y cuando estos se adaptaron a la oscuridad, se estiró por sobre Vladimir para tomar el teléfono, pues no era el suyo el que estaba sonando, era el de él.

Tomó el moderno celular entre sus manos y le echó una mirada a la hora y su ceño se arrugó al ver apenas eran las cuatro de la mañana. Dirigió su mirada al identificador de llamadas, y leyó el nombre del que suponía era el hermano de Vladimir "Aleksey".

Sin dudarlo ni un segundo respondió a la llamada.

—¿Hola? — preguntó en el idioma inglés, un tanto tímida.

—¿Hola? — preguntó también del otro lado Aleksey, su voz voz se escuchaba ahogada y ronca— ¿Está mi hermano por ahí? — cuestionó sin detenerse a preguntar quien había respondido la llamada.

—Él está durmiendo— le respondió Irina, frunciendo el ceño.

—Despiértalo — pidió, pero más bien sonó como una orden —lo que tengo que decirle es importante— el cuerpo de Irina se tensó, temiendo lo peor— llamaré nuevamente en cinco minutos— le avisó para luego culminar la llamada sin esperar una respuesta.

Irina retiró el teléfono de su oreja para mirar la pantalla de este, donde sólo se veía el historial de llamadas. Soltó un suspiro antes de acercarse a Vladimir y comenzar a acariciar su mejilla con delicadeza.

No quería despertarlo, pero algo le decía que debía hacerlo, así que, sin perder tiempo, lo tomó por los hombros y comenzó a sacudrirlo, no pasaron cinco minutos cuando ya Vladimir tenía los ojos abiertos, mirando su sombra entre la escasa luz con el ceño fruncido.

—¿Qué pasa? — preguntó con voz ronca— ¿Qué haces despierta?

—Tu hermano se llama Aleksey, ¿Verdad? — preguntó en su dirección, el ceño de Vladimir se frunció, y se sentó en la cama con un poco de pereza.

—Sí, así es, ¿Por qué? — demandó, Irina no llegó a responderle cuando una nueva llamada entró al celular de Vladimir. Ella no dudó en pasárselo, y el ceño de Vladimir se frunció más al leer el nombre de su hermano en el identificador de llamadas.

>> —¿Aleksey? — preguntó Vladimir, al mismo tiempo que su cuerpo se tensaba.

Irina no supo qué fue lo que le dijo su hermano al otro lado de la línea, pero sí fue testigo de cómo los colores abandonaron el rostro de Vladimir, dejándolo completamente pálido, el teléfono resbaló de sus manos cayendo directo en la cama en un sonido sordo.

—¿Cariño? — preguntó ella preocupada, posando una de sus manos sobre uno de los hombros de Vladimir.

—Necesito regresar a Rusia, ya— susurró él, al mismo tiempo que en un rápido movimiento se levantaba de la cama tomando el teléfono entre sus manos, moviendo sus dedos sobre la pantalla de este, para luengo llevárselo a la oreja derecha, tardando solo unos segundos en hablar— Boris, necesito que contactes a Alexander, necesitamos volver a Rusia.

Boris le dijo algo al otro lado, y tras conversar por unos minutos más, la llamada se terminó.

Vladimir estuvo a punto de caminar hacia el closet, pero la dulce y suave voz de Irina lo detuvo.