"De pronto, mis ojos se posaron en una persona. Aquel cabello mayormente oscuro y ondulado lo había visto en alguna parte antes. Una chica estaba sentada en un banco a pocos metros de mí y parecía estar ensimismada en sus pensamientos a la vez que e...
Correr me había dejado exhausto, pero en el fondo había sido revitalizante. No sabía la falta que me hacía salir a la calle y respirar aire puro hasta que lo había hecho.
Cerré la puerta detrás de mí y me quité la camiseta sudada, dejándola encima del piano. Al instante me vino el sentido de la responsabilidad y recoloqué la sudada ropa en la lavadora.
Me dirigí a la ducha, donde pretendía pasar los próximos 30-40 minutos y abrí el grifo de la misma. En momentos como aquel adoraba tener una ducha con hidromasaje, que arrancase de mi cuerpo todas y cada una de las preocupaciones que pudiera tener. Al menos durante unos instantes.
Terminé de acicalarme después de una hora, sintiendo que me había quitado un peso enorme de encima. Debían de ser las 20:00 de la tarde por lo que decidí volver a salir a la calle a dar una vuelta. Me puse una gorra y gafas de sol negras, de forma que dificultaba reconocerme. No me malinterpretéis, adoro a los fans y me encanta dedicarles el tiempo que se merecen. Sin embargo, no me encontraba en el mejor momento de mi vida y necesitaba estar un tiempo a solas conmigo mismo, algo que no podría lograr si debía estar sacándome fotos o firmando autógrafos el resto de la tarde.
Me dirigí a Piccadilly Circus con la esperanza de no ser reconocido por nadie. Cuanta más gente hubiera al rededor, por irónico que sonase, menos se fijaban en mí.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Adoraba esta ciudad. No se parecía en nada a Mullingar, pero a estas alturas me sentía como en casa. Trataba de recordarme a mí mismo que mi vida no terminaba al acabar esa relación, sino que había cosas maravillosas que me rodeaban a diario. Aquel lugar era prueba de ello. Especialmente, por todos y cada uno de los acontecimientos que me habían llevado allí. Mi vida hubiera sido completamente diferente de no haber realizado aquella audición en 2010. No debía dejarme hundir por una mala racha.
Seguí caminando, pasando por Trafalgar Square hasta llegar a Westminster. Era realmente precioso. El Parlamento Británico estaba adecuadamente iluminado, haciéndolo parecer incluso más imponente de lo que lo era de día. En ese momento, me vino un flashback de Amanda caminando junto a mí, cogidos de la mano. Cómo había cambiado todo en apenas unas semanas. Ahora en lugar de sujetar su mano, escondía las mías en los bolsillos y caminaba sin compañía alguna.
{ Lara }
Tanto Alina como yo habíamos estado en Londres anteriormente. Sin embargo, nuestras estancias habían sido cortas y no conocíamos la ciudad tan bien como quisiéramos.
Nos costó un poco orientarnos para dar con el camino que nos llevaría a ver el Big Ben de noche. Tras unos minutos trasteando en el Google Maps, por fin emprendimos una ruta que parecía ser la correcta. Al final, conseguimos llegar a Westminster. En realidad no era tan complicado ya que el camino fue recto casi en su totalidad.
- Menos mal que han terminado las obras. La última vez que estuve aquí lo máximo que se podía ver del Big Ben era una lona con su dibujo. - Dije chistosa.
