La semana había pasado rápido y Erin había llenado otro cuaderno de posibles tácticas. La gran cantidad de tiempo libre le había dado muchas oportunidades, como escabullirse a la práctica del equipo de Slytherin, escuchar las nuevas incorporaciones al equipo de Ravenclaw y releer Quidditch a través de los tiempos. Había estado de muy buen humor los últimos días, ya que las pruebas salieron muy bien.
Aparecieron nueve personas nuevas, lo que fue una buena cantidad para los pequeños lugares que debían llenarse. Dos de ellos fueron por la posición de Guardián, uno de ellos era de primer año, pero afortunadamente el segundo parecía saber lo que estaba haciendo. Era un año más joven que Erin y lo había probado antes, pero había mejorado mucho en el último año. Sin embargo, Erin también tenía que defender su propia posición, así que ese era su enfoque principal. A estas alturas ya sabía cómo jugar en las pruebas. Necesitaba mostrar su velocidad, puntería y trabajo en equipo. Madame Hooch prefiere especialmente un buen pase que un disparo mediocre al arco.
–¿Qué piensas del nuevo lote de este año?– le había preguntado a Erin después, lo que percibió como una buena señal. Querer saber su opinión significaba que estaba en el equipo, ¿Verdad?
–Beckett, el que va por el puesto de Guardián ha hecho grandes mejoras desde su última prueba. La chica de segundo año que va por el puesto de Cazadora también parece prometedora, pero necesita un poco más de práctica. Quizás sería una buena reserva– había dicho ella. Era lo que haría si fuera capitana.
El estado de ánimo de Erin solo mejoró cuando llegó el sábado por la mañana, ya que estaría recibiendo su primera lección de aparición. Todos los que cumplieran diecisiete años este año podían participar por 12 galeones y, dado que el cumpleaños de Erin era en mayo, se había inscrito de inmediato. Beatrice estaba menos alegre, ya que su cumpleaños es en noviembre. Tendría que esperar hasta su séptimo año para unirse.
Aunque su mejor amiga no estuvo a su lado durante esas lecciones, Erin estaba súper emocionada. Caminó hasta el Gran Comedor, donde se llevarían a cabo las clases, con Anthony Rickett, quien también estaba en el equipo de quidditch de Hufflepuff. Solo se había unido el año pasado como golpeador y Erin aún no lo conocía muy bien, pero esta era una gran manera de cambiar eso.
El Gran Comedor estaba bastante lleno de colores rojo y amarillo. Slytherin y Ravenclaw tenían una clase separada, que a menudo era la combinación de clases en Hogwarts. Los Slytherins realmente no se llevaban bien con Gryffindor y la mayoría de los Hufflepuffs también se sentían incómodos con ellos. A Erin no le importaba Slytherin, ya que tenía un par de amigos de esa casa, pero había algunas manzanas podridas que mantenían la imagen de "chicos malos".
–Parece que estás en todas partes últimamente– escuchó Erin. Se dio la vuelta para encontrarse con el único Oliver Wood. Realmente estuvo más presente este año de lo que ella esperaba. Aparentemente él también cumplió años antes, ya que era de séptimo año.
–Oh, ¿Por qué?– ella preguntó.
–Estabas en el campo, luego conocí a tu hermano pequeño y ahora aquí.
–¿Conociste a Benji?– Erin estaba un poco preocupada de que Oliver, sabiendo que Benji era su hermano pudiera afectar el resultado de sus pruebas. Oliver había sido amable con Erin en el campo su primer día de regreso, pero ella sabía que él no lo hacía porque le gustaba. A Oliver no le gustaba nadie de otro equipo de quidditch. A Erin le sorprendió lo ingenua que había sido el año pasado.
–Sí, está probando para el equipo. ¿Es bueno?– Oliver preguntó, de nuevo pareciendo sorprendentemente agradable.
–Es un gran volador, súper rápido. No ha tenido tanta práctica como otros, pero creo que podría ser realmente bueno– dijo Erin. Si podía ayudar a su hermano de alguna manera, esta era la forma de hacerlo.
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𝐂𝐚𝐩𝐭𝐚𝐢𝐧 |𝐎𝐥𝐢𝐯𝐞𝐫 𝐖𝐨𝐨𝐝| ✓
Fanfiction"¿Qué? No, por supuesto que no. Estás bromeando, ¿Verdad?" Eso fue lo que Oliver Wood le dijo a Erin Evans cuando ella finalmente se armó de valor para invitarlo a salir. Él había pisado su corazón y ni siquiera parecía darse cuenta. Pero este año...