45. la poesía.

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Cuando el azul en el cielo abrazaba las nubes, entonces se hacía la luz del sol, y solo era capaz de ver luz, no había oscuridad, no había sombras, era el sol ardiente iluminando su rostro mientras sus pestañas apenas podían mantenerse en lo alto, y su aliento era profundo.

Y la luz de mediodía, ella la cubría de sus ojos.

Y Miyeon cubría sus sentimientos de Minnie.

¿Qué sentido tenía?

La flor lamentable, que jamás sería apreciada, que comenzaba a marchitarse.

— Entiendo cómo te sientes

La muchacha negó con la cabeza, negándose a sí misma para convencerse de que nadie podría jamás entenderla.

— No, realmente no lo haces

— ¿El sentimiento de querer estar con alguien y protegerlo pero saber que no tiene sentido porque no eres tú quien le hace bien? —Minghao rió—. Sí, creo que lo conozco bien

Miyeon giró sobre sus talones, observando fijamente los ojos del más alto. Sus cejas fruncidas, su corazón se sentía como una uva transformándose en pasa.

Secándose.

A punto de marchitarse.

— ¿Tú? Tienes todo. Estás lleno de todo. ¿Por qué lo sabrías? Si alguien te interesa, simplemente lo consigues, si quieres algo, lo que sea, tú realmente lo tendrás. Estás completo

— Tú estás tan vacía

— ¿Sin nadie?

— Vacía —repitió el menor. La coreana le observó sin entender—. No tienes nada en el corazón, y careces de interés

— ¿Eso qué significa?

— Te comportas como si necesitaras de algo. ¿Realmente vale tanto la pena estar detrás de alguien de ésta manera? Estás llenado a Minnie mientras te vacías

— Eres siempre romántico pero cuando te lo propones lo rompes todo

— Te gusta tanto Minnie que renuncias a todo lo que sabes que mereces porque crees que puedes hacerla alguien mejor —ella lo miraba fijamente para escucharlo hablar, de cualquier forma, él solo iba a ignorarla hasta que terminara—. Crees que puedes hacer bien en alguien que está vacío, roto, y que dejará ir todo lo que le des porque en realidad ella quiere dárselo a alguien más

Minghao casi siempre ignoraba sus palabras. Ésa vez, Miyeon quería pedirle que se detuviera.

— Sabes tus verdades pero finges que no existen porque prefieres ser enamorada con mentiras antes que lastimada con verdades

— Eres crudo

— Te quemaste

Miyeon giró sobre sus talones, dispuesta a irse.

Sin embargo, sus pasos se detuvieron por sí mismos.

Ella quería irse. Quería abandonarlo, quería dejarlo solo, decirle que no estaba ayudando y que todo lo que decía solamente la lastimaba, pero mientras su cerebro endulzaba mentiras su corazón sabía la verdad.

— Tú y yo sabemos quién es Minnie

El susurro de Minghao sólo quería llegar a ella. Su voz siempre había sido tan dulce que endulzaba incluso los insultos.

— De lo que es capaz

— Solo necesita ser protegida

— ¿A qué costo?

𖥔 Rumor ── soohua ╱ minyeon. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora