𖥔 Rumor ── soohua ╱ minyeon.

02. cortar la raíz con un cuchillo.

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Miyeon jugaba con la pequeña pelota color violeta mientras esperaba que Minnie saliera de la oficina de la psicóloga Park, quien estaba en compañía del director de la institución. Las discusiones jamás habían faltado, todos estaban acostumbrados a las peleas verbales que se llevaban a cabo semanalmente entre Nayeon y otras personas, pero ésta era quizá la primera vez en mucho tiempo que la pelea era física. 

Minnie tenía un labio roto, y muchas explicaciones que dar respecto a su repentino ataque de ira. 

— Hey, Miyeon —susurró Soojin, sentándose al lado de la pelinegra, su rostro preocupado, pero su mirada no se encontró con los ojos de la contraria—. Cuando Minnie salga, dile que lo siento. También pídele que deje de meterse en problemas por mi culpa.

— No importa lo que diga, ambas sabemos que no se va a detener —Miyeon soltó una risita, negando con la cabeza, para después dirigir su mirada hasta la más alta—. Ella te quiere, Soojin. Eres su mejor amiga desde la infancia y toda la lejanía que has comenzado a plantar entre ustedes la está dañando, ¿no te das cuenta?

Los ojos de Miyeon se encontraron con los de Soojin finalmente. La mirada de la menor lucía honesta, como si de verdad lamentara lo que había sucedido y quisiera encontrar una solución para todos aquellos problemas que comenzaban a suceder más seguido. 

— Lo lamento. Si es así, entonces creo que quizá lo mejor es que dejemos de ser amigas 

Aquellas palabras habían quemado como el fuego del infierno mientras escalaban por su garganta hasta ser escupidas por sus labios. No quería alejarla, no sabía qué sería de ella sin las otras dos, pero necesitaba detener a Minnie. Necesitaba que las cosas se calmaran, y para aquello debía provocar que Minnie no quisiera nada de ella. Que tuviera una mala imagen de ella, como todos los demás ya la tenían. Estaba dispuesta a quedarse sola, si aquello protegía a sus amigas de ella misma, y todos los problemas que estaba provocando su relación. 

— ¿Qué? ¿Qué estás diciendo? ¿Te volviste loca?

— Últimamente se ha metido en problemas por mi culpa, y también se preocupan demasiado por mí. No quiero que siga siendo así, y tampoco creo necesitar de sus preocupaciones y todo eso. Solo... Dejen de buscarme, las tres estaremos mejor si nos alejamos

— Sabes que cuando termines con Jongin no tendrás a nadie, ¿verdad? Mierda, es decir, ni siquiera quedándote con él tienes a alguien. ¿Es que no lo ves? Ese tipo te lastima, te está dejando sin tus colores. Necesitas alejarte, deberías… —la mayor fue interrumpida por las palabras de la contraria. Su rostro impasible al escucharla quejarse de su decisión. 

— Ya tomé una decisión, Miyeon. Díselo a Minnie —su voz sonó cortante y grosera, a pesar de que ese no era su plan—. Nos vemos

Aquello no era para nada la verdad. Soojin no quería alejarse de Miyeon y Minnie. Soojin las adoraba, eran lo más importante para ella, pero ella estaba dañándoles. 

Ella estaba podrida, y debía evitar que ellas también lo estuvieran, aún si aquello significaba dejarlas para siempre: lastimarse y lastimarlas, para que consiguieran la tranquilidad. 

Estarían bien. Ellas eran fuertes, y totalmente capaces de sobrevivir sin ella. No había algo que pudieran extrañar. Solo era cuestión de tiempo. 

Mientras se alejaba de su amiga para encontrarse de nuevo con Jongin, su cabeza era un nudo. No estaba segura de lo que acababa de hacer, pero ya no había vuelta atrás. Era probable que ni Minnie y mucho menos Miyeon estuvieran dispuestas a volver a hablarle después de la manera vil en que las había sacado de su vida.