¿Dixon?

Capítulo 30: En Richmound, Virginia.

En Richmound, Virginia.

- ¡____! -Cristo, llévame-, ¡Dios! ¿acaso no piensas despertar? -abrí un ojo y vi a Caroline con ambas manos en su cadera, negué con la cabeza y moví mi mano buscando la almohada, cuando la encontré me la coloqué encima mientras tapaba ambos lados de mis oidos, luego dejé mis manos caer a ambos costados-. Oh no señorita, no vas a cubrirte con esa almohada y hacer como si nada, te me paras, ¡pero ya! -jaló de mi mano y me abracé a la camilla-. Maldición, ¡suél-ta-te! -después de unos minutos forsajeando y renegando, mi mano se resvaló y Caroline arrasó conmigo haciendo que ambas cayéramos en el piso.

En el -duro y rompe-cabezas-, piso.

Gracias a Dios que estaba el cuerpo de Caroline para amortiguar mi caida.

- ¿Quieres moverte de encima?

- No. -solté adormilada.

- Bien. -hizo unos extraños movimientos logrando que después de unos segundos mi cuerpo impactara con el piso.

- Auch. -mi voz sonó como la de un robot y luego volví a seguir durmiendo.

- ¿Se puede saber por qué estás tan cansada? -negué y me arrastré hacia la camilla mientras escalaba esta como si no tuviera piernas para ponerme de pié-. ¿No piensas moverte? -negué, afirmando que no me movería, al menos no por ahora-. Bien. -escuché sus zapatos rechinar en el suelo, alejándose.

Gracias Dios.

Aunque puede que sea porque le ha vuelto el mes, a veces es buena y por eso agradezco que andrés le haga su visita matutina, solo a veces.

Sentí que el agua me empapaba de pies a cabeza como si me encontrara parada de cabeza.

- ¡La puta madre! -me sobresalté y salí de mi camilla, resbalando con el agua que había en el suelo, escuché la risa de Caroline- ¿¡ACASO ESTÁS LOCA?! ¿¡QUÉ MIERDA TE PASA!?, ¡ME PUDE HABER ROTO LA CABEZA! ¡PUDE HABER CAIDO EN COMA! ¡PUDE ROMPERME ALGO! ¡PODRÍA MORIR! O... ¡O AHOGARME! -Caroline seguía riendo, lancé un grito de guerra y la tiré en la inundación que había hecho en mi cuarto, sonreí triunfante, pero mi sonrisa se borró al ver que estaba completanmente quieta y con el rostro serio, sin emitir sonido alguno-. ¿Caroline? -no contestó-, ¿Caroline? -nada, me agache y me coloqué frente a ella- ¿Caroline? ¿Caroline estás ahí? ¡Caroline, despierta! ¡CAROLINE, RUBIA OXIGENADA, ABRE LOS PUTOS OJOS MEDIO CHINOS Y NORMALES QUE TIENES! ¡DES-PIER-TA! -comencé a tirarle bofetadas con los ojos cerrados, lo ví en unas películas, a veces funcionaba, en otras ocaciones no, pero esperemos a que si- ¡CAROLINE, DESPIERTA! ¡SI NO DESPIERTAS SAM ME DENUNCIARÁ E IRÉ PRESA! ¡DESPIERTA!

- ¡Estoy despierta! -seguí con mi tarea sin importar lo que pasarara-, ¡deja de golpearme! -tiré una última bofetada por si las dudas y abrí los ojos, ella me miró con la mayor seriedad posible y yo me encogí de hombros-, ¿te han dicho que tiendes a ser muy exagerada? -no dije nada y me puse en pié estirándole una mano para que se pudiera levantar, lo cual ella hizo, puso los ojos en blanco y luego se marchó hacia quien sabe donde.

- Pensé que no estarias despierta después de lo de anoche -sonrió y me volteé para quitar las sábanas-, ¿sabes por qué Caroline salió moj...? -la voz de Carl se dejó de escuchar y el ruido de algo chocando con el piso se hizo presente, nuevamente me volteé y lo vi tirado en el charco sobando su cabeza, soltando algunos quejidos y unas maldiciones.

- Creo que ya tienes tu respuesta. -sonreí y le extendí la mano la cual tomó y se puso de pié, movió su cabeza acomodando unos mechones rebeldes y se sobó ambas manos en los pantalones para secarlas, sonrió y recogió su sombrero de sheriff colocándolo en la esquina de la camilla.