Senju-Uzumaki | Neji Hyuga|

Capítulo 14 - ¡Que Comience el Plan!.

El viento en mi rostro me hizo cerrar mis ojos y simplemente concentrarme en el cálido viento.

Me encontraba sentada en la ventana, me sentía calmada desde que Gaara apoyó mi plan y decidiera que lo llevaríamos a cabo.

Para mi suerte en la tarde probamos cuán rápido podía moverme con su armadura de arena, y resulta que mi armadura de chakra contrarrestaba casi totalmente la falta de agilidad y rapidez de la suya.

Ahora sólo quedaba esperar que la armadura de arena realmente impida que el sedante haga efecto en mi, no tenemos una forma de probarlo, así que sólo queda ponerlo a prueba mañana.

— Deberías dormir. — la suave voz de Neji me hizo abrir mis ojos y mirarlo.

— Tu también. — afirmé y recibí un suspiro de se parte — Pero no puedes. — comprendí.

Él se acercó y me abrazó por la cintura, escondiendo su rostro en mi cuello — ¿Cómo puedo dormir pensando en que tengo que dejar que te secuestren?. — murmuró — Estoy consciente que toda misión tiene sus riesgos, y en que eres una gran kunioichi, pero eso no impide que no me preocupe por ti. — suspiró — Eres mi novia, y quiero protegerte.

Dejé que mi cabeza caer hacia atrás, posándose en su hombro — Todo estará bien. — aseguré.

— Pero si llega a pasar algo no podré llegar a ti... — acarició con la punta de su nariz mi cuello.

— Entonces seré yo quien llegue a ti. — afirmé mientras disfrutaba de aquella caricia.

Él no respondió, sólo comenzó a depositar suaves besos en mi cuello, y juro que aquello sólo lograba derretirme y erizar mis bellos cada vez más.

Un repentino suspiro que chocó con mi cuello me hizo estremecer — Olvidemos este tema por unas horas. — pidió — Ahora sólo quiero disfrutar de tu compañía.

Asentí totalmente de acuerdo — Apoyo eso totalmente.

Mi respuesta causó que una ligera risa saliera de sus labios — Vamos a acostarnos.

Un ligero ardor en mi rostro me hizo desviar mi rostro al lado contrario del suyo — Vamos.

Me ayudó a bajar del marco de la ventana y tomados de la mano nos dirigimos a la cama más cercana, debido a que ambos ya estábamos con pijama simplemente nos acostamos viéndonos a la cara.

Por mi parte no dudé en acercarme a su cuerpo y abrazarlo, y él no tardó en abrazarme y apegarme aún más a él.

Claramente no era la primera vez que dormíamos juntos en la misma cama, de hecho en antiguas misiones hemos dormido juntos en la misma carpa, aunque no hemos pasado de eso, dormir.

— Eres hermosa. — murmuró mientras dejaba suaves caricias en mi brazo.

Sonreí y pegué mi frente a su torso — Te diría que tu eres muy apuesto, pero con tanta mujer tras de ti ya debes de tenerlo en claro. — molesté.

Una leve risa de su parte me hizo sonreír en grande.

— No sé de que hablas. — aseguró — Mi vista siempre a estado en una sola chica. — besó mi frente — Una hermosa pelirroja de ojos verdes, — hizo que lo mirara y comenzó a acariciar mi cabello — realmente inteligente, hábil y fuerte. — me sonrió.

Me estiré y besé sus labios con amor, y sólo nos separamos cuando tuvimos la necesidad de llenar nuestros pulmones con oxígeno nuevamente.

— Realmente me tienes completamente enamorada, mi chico pantene. — susurré sobre sus labios.