17. Detergente Super Líquido Cipayos

114 18 1
                                    

17. Detergente Super Líquido Cipayos

–¡LA ENCONTRÉ!

–¿La manera de que Heath confiese?–rió Kyle.

Durante aquella semana apenas nos habíamos visto, y lo odiaba. Entre Jack, Jenny y Maya, y alguna nota más que me amenazaba si intentaba averiguar quién me amenazaba no habíamos podido hablar tranquilamente de nuestras cosas.

–No, eso aún no.–suspiré decaída.–¡Mi carpeta de matemáticas!

–Eres un desastre.

–Pero me quieres.–sonreí.

–¿Yo? Más que nadie, princesa.–soltó una carcajada Jack, que apareció en esos momentos y me abrazó por detrás.

–Bueno, andas empatado conmigo.–sonrió Kyle.

–A ver, los dos me queréis, pero evidentemente quien más me ama es...

¡Redoble de tambores! Prrrrum prrrruuum...

–Linda.–terminé.

Ambos me mandaron a paseo, me llamaron tonta, y se fueron a su clase puesto que acababa de sonar el timbre.

–¡Megan, espera un momento!–me gritó una voz desde el pasillo y me di la vuelta.

–Heath, que sorpresa. Tú nunca entras a clase cuando suena el timbre. ¿No tienes dinero para los pitillos?

–No tengo tiempo para discutir o llegaré tarde a clase.

–¿Quién eres tú y qué has hecho con Heath?–le pregunté muy extrañada.

–Llevo las matemáticas muy flojas, y necesito tiempo para estudiar, así que no puedo entrenar contigo hoy, ni mañana...

–¿Qué? ¿Tú estudiando? No me creo que sepas lo que es.

–Ja, ja, tú en cambio conoces perfectamente lo que es la estupidez.

–Ja, ja. Que te den, idiota.–me di la vuelta para marcharme.

–¡Hoy no estoy castigado! ¡Volvemos juntos!–gritó ya cuando se iba.

Me quedé paralizada. De acuerdo. Podía no fumar, no querer entrenar y estudiar. ¿¡Pero no tener castigo!?

Aquello se trataba de algo muy serio. Le contaría a Kyle, y el equipo los Detectives Son La Clave entraría en acción para averiguar qué sucedía.

***

–¿DSLC?–me miró Kyle.

Estaba a mi izquierda, mientras yo metía a toda prisa mis libros en la taquilla. Leía las iniciales que le acababa de escribir con boli en la mano derecha.

–A partir de hoy, formamos un equipo de detectives.–dije mientras esperaba que cayera al suelo, como cada mañana, una notita amenazante.

–¿El equipo Detergente Super Líquido Cipayos?

Nada. No había ninguna nota. Por ningún lado, que raro.

–El equipo Detectives Son La Clave.–cerré la taquilla.

–De acuerdo, ¿y qué investigamos?-quiso saber.–¿Amoríos escandalosos? ¿Robos en las clases?

–A Heath.–susurré.

–Otra vez.–resopló.

–Ahora es más importante. No fuma y quiere estudiar.

–Bueno, eso no es nada malo.–le quitó importancia.

BETTERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora