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SECRETO PROFESIONAL.
Harry necesitaba a alguien.
Esta vez no a Finlay ni Camille, esta vez se trataba de algo más personal.
La vida de Harry ya tenía un ritmo que le resultaba estable, estaba acostumbrado a todo lo que había conocido, fama, prensa, familia, amigos, fiestas, su trabajo, se había acostumbrado a tener a su prometida en su vida y que luego de ardo trabajo, sus fans y el medio público hayan aceptado a Camille, que hayan aceptado que había encontrado alguien que lo hacía sentir en calma y aunque no les cierre por cualquier cosa ya sea la nostalgia de seguir viéndolo como al chico de dieciséis que entraba a TXF o simples celos posesivos; Él ya había decidido hacer que Rowe sería permanente, así que ya estaba acoplado a la idea que tenía de lo que sería toda su vida... y luego Finlay llegó.
Todo se salió de las manos, todo se dió vuelta, había conocido cosas de sí mismo que antes ni se imaginaba sólo por tenerla a su alrededor... y ahora solo la quería a ella, la chica estaba en su mente ni aunque intentara sacarsela de ahí un momento, simplemente se había instalado ahí y se convirtió en el "¿Qué pasaría si..." del curso de su vida.
Fué tan delicado que no podía apuntar al momento exacto en el que todo había comenzado a ser imposible de manejar, la manera en la que se había adentrado a su corazón tan disimuladamente, con pasos silenciosos pero golpes fuertes pasando cualquier límite que él creía tener en la vida. Quería a la chica como un niño, como si todo fuese nuevo y estuviese perdido en cómo manejar su alrededor para hacer que nada interfiera entre ellos, pero era un adulto y debía afrontar que gracias a sus propias decisiones ahora todo estaba entre ellos, hasta cosas que se salían de su control.
No tenía control sobre cómo se vería, no tenía control sobre la edad y la situación que ya creó, no podía cambiar que ya se había encontrado enamorado de ella cuando estaba siendo infiel y que eso nadie lo vería bien.
Podría perder toda la carrera por la que tanto trabajó, hasta podría arruinar las oportunidades de la gente que trabajaba con él, la gente que gracias al éxito de su música podía alimentar a su familia, había productores, escritores, agentes, equipo publicitario, todo si él se rendía y arruinaba su reputación por la mujer que lo volvía loco.
No se imaginaba un escenario bueno en su cabeza, siempre había algo malo que terminaría pasando;
Dejo a Camille, se sabe que lo hago por una chica que aún sigue a mitad de su último año en secundaria, sacan de contexto todo y hacen que parezca que he manipulado mi poder para hacer que una adolescente mantenga una relación íntima conmigo. Eso sería malo.
