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LA VIDA SIGUE.
Where you at?? —blondie
A que te refieres?? —Finlay Wallace.
LA o malibú? —blondie
Ahora en LA, pero mañana vuelvo a malibú, ya sabes la rutina Qué pasa?? —Finlay Wallace.
Me habló de nuevo Estoy cansada Necesito despejarme —blondie
Ni lo digas, te espero en casa —Finlay Wallace.
Finlay se levanta de la cama para prepararse un café, si bien iba a dormirse una siesta para recuperar las horas de sueño que perdió por el estudio y las tareas, no pensaba dejar que Billie esté sola.
Eilish, sí, inevitablemente en un lugar como California, las vueltas de la vida hicieron que Billie la reconozca hace unos meses por la calle, lo cual era loco porque Fin no pensaba acercarse con confianza, ni siquiera siguió a Perla en el tumulto de gente que se armó al final de la calle, solo fué una rápida mirada la que trajo los recuerdos a Billie de la agradable chica que Harry había llevado a su casa, y agitando la mano hacia ella dijo un simple "Ha pasado un largo tiempo" que por suerte no muchos notaron.
El estómago de Finlay cayó al suelo cuando al tener el wifi conectado dos dias después, leyó un mensaje nuevo de un número desconocido.
Finlayyyy Soy billie Le pedí tu número a harry Espero no te moleste Sigo en LA, estas libre hoy?
Harry se sintió algo acorralado al recibir el pedido de la artista, pero se trago sus pensamientos para solo dárselo y rezar porque Finlay no lo tome a mal.
Fué una decisión muy espontánea de parte de la artista, solo fue para matar el aburrimiento del jueves pero tiempo luego podría decirse que agradecía aquella invitación impulsiva, ya que ahora tenía una nueva amiga que no buscaba nada de ella, solo le daba su amistad, su comprensión y le daba una mano en decir las cosas que su propia cabeza no lograba hacer que escuche.
Henos aquí, las cortinas de la casa completamente cerradas para que nadie esté enterado de que en la casa que la tranquila estudiante alquilaba, estaba una celebridad en el sofá golpeando la almohada en su regazo mientras contaba el infierno que su ex le hacía pasar.
—¿Por qué no puede seguir con su vida y dejarme putamente sola? Estoy más feliz que nunca, pero el llega con un texto estúpido haciéndome sentir tan impotente por toda la mierda que me hizo vivir—habla genuinamente sin entender lo que pasaba por la mente del inmaduro chico, y Finlay bebe de su café sabiendo que aún no acababa de hablar—Ya tuvimos esta conversación—se da cuenta por un deja vú que esto ya lo había vivido.
