PÁRPADOS.
La noche del jueves se pasa volando mientras Harry mira a la ventana con desesperanza, repitiéndose las palabras que Camille soltó hace unas horas, y trata con toda su alma de ignorar los textos de Finlay quien se había preocupado porque él no era de conectarse por largo rato solo para dejarla en visto, ni siquiera cuando hacía una rabieta de las suyas.
Había hecho mal y lo sabía, no tenía excusa alguna.
Había puesto una venda en sus ojos cuando se trató de Finlay, sin darle la importancia debida a su edad y falta de experiencia, había mantenido esa misma venda cuando pensaba en sí mismo junto a ella, llegando a creerse que eran solo dos jóvenes adultos quienes se habían enamorado y trataban de lidiar con ello, de arreglar sus errores humanos...pero no podía pretender que era así de simple.
Siempre sería Harry Styles, siempre sería él quien empleó a una niña de dieciocho y aún sin quererlo ni darse cuenta, la encantó con su poder, no podía fingir que ella lo vió como a cualquiera, Finlay se ponía nerviosa y se cohibía cuando él la miraba, definitivamente había un desbalance de poderes que él se negó a tomar en cuenta.
Su mente pasa por todos los lugares recorridos, recuerda su propia exposición al mundo, a los dieciséis, cuando fué solo cuestión de pocos meses para que de ser un trabajador en una panadería, pase a ser acosado por paparazzis y fanaticas.
—Dios, si alguien tan solo me hubiese advertido—mira hacia el cielo recordando a su mamá texteandole que no se preocupe por ella aún cuando en la calle gente de prensa le preguntaba las cosas más asquerosas sobre su hijo menor, cosas que no eran y nunca serían propias del muchacho que crió.
Y desde ese momento, se convirtió en esta nueva persona que lastimosamente perdió contacto con las simples cosas que atesoraba en sus años dorados, perdió tacto con el Harry que estaba en una banda con sus amigos de la secundaria, esta nueva persona pensaba de forma tan diferente, no tenía lugar en su cabeza que no pase por su constante guerra contra la fama y sus consecuencias, mientras que se sostenía a ella porque quería seguir haciendo lo que le gustaba.
Se da cuenta en ese momento que quizás esa era la respuesta del porqué había caído por Finlay más que cualquier persona en su pasado... ese Harry simple estaba ahí cuando estaba a su lado, se volvía ese muchacho de sencillos y puros sentimientos cuando miraba a los ojos de la castaña y solo sentía que estaba en la heladería de su ciudad tratando de tomar coraje para tomarle la mano a la chica que le gustaba.
Sonaba a una mala excusa sentir que volvía a sentirse un adolescente con ella, pero está tan confundido porque ni siquiera pudo vivir a ese Harry en la edad de Finlay, él no pudo tener la experiencia que ella, mientras Wallace estudiaba, salía con amigos y crecía en su ciudad natal rodeada de paz y tranquilidad, él oía gritos de emoción cada noche, grababa, componía y ensayaba más tiempo que el que pasaba durmiendo, era explotado por su disquera, leía encabezados que decían cosas falsas de él y su intimidad llegando hasta la imagen que tenía de si mismo durante años... no podía pretender que ella lo veía sin notar que estaban en mundos opuestos.
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drivers license › harry styles.
أدب الهواة"𝘕𝘰 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘰 𝘦𝘯𝘵𝘦𝘯𝘥𝘦𝘳 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘦𝘴 𝘲𝘶𝘦 𝘱𝘶𝘦𝘥𝘦𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘳 𝘣𝘪𝘦𝘯 𝘴𝘢𝘣𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘺𝘢 𝘯𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘰𝘺. 𝘚𝘶𝘱𝘰𝘯𝘨𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘮𝘦𝘯𝘵𝘪𝘢𝘴 𝘦𝘯 𝘦𝘴𝘢 𝘤𝘢𝘯𝘤𝘪𝘰́𝘯 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 𝘮𝘪. 𝘗𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘪𝘫𝘪𝘴𝘵𝘦 "𝘱�...