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P.O.V Sarah

-Esperaba que no supieran sobre su cumpleaños...-murmuró dándome un cálido abrazo, el cual tarde un poco en corresponder.-...ahora se excusarán más.

-¿Excusarse? ¿Fiesta?-pregunté confundida, y entre todos se lanzaron una mirada buscando ayuda. Ya sabían como me ponía con esas cosas.-Díganlo.-dije firmemente, y todos cedieron después de dos segundos de resistencia.

Al final de cuentas, y no sé cómo, terminaron por convencerme. Ya llevaban planeando desde hace un par de semanas una fiesta (ilegal, en términos de reglas) en la sala común de Gryffindor.
Resulta que invitan a otras casas, y prácticamente todos ya conocen las ubicaciones, más no las contraseñas, ya que tienen acuerdos o algo por el estilo. Termine cediendo, más porque ya sabía dónde estaba su sala común, y en segundo, porque nadie delataba a nadie. Si no llegue ni a enterarme de las que hacían en mi propia sala común, eran buenos.
Aunque al final de cuentas, la sala común de Ravenclaw es más amplia, y hay más espacio entre habitaciones. (Video en la multimedia)
Y Katie tenía razón, se excusaron en mi cumpleaños para hacer todo eso.

-Bien, entonces en las escaleras a las...¿8:00?-pregunté ingenuamente, y todos rieron.-Bien, lo más tarde que acepto es a las 10:00, mañana hay clases.

-¿Te sentirás cansada, acaso?-preguntaron al unísono los gemelos, sabiendo a la perfección que apenas y dormía bien.

-Graciosos.-dije con sarcasmo, haciendo mi típica mueca burlona.-Necesitó ver a Neville, ¿saben dónde está?

Para ser honesta, pregunté inocentemente, esperando que dijeran que no o en su defecto, dijeran que irían a checar a su sala común. Pero por sus expresiones asustadas, y sus caras pálidas, entendí que los gemelos sabían algo.

Comenzaron a guiarme por el bosque, y afortunadamente, Katie se fue con sus amigas. No es por ser grosera, pero no me gustaba estar con mi hermana. Me gustaba más tener eso por separados, así por razones obvias no sean nuestra culpa los problemas entre nuestros padres, es incómodo.

Creía conocer este camino, y cada vez que avanzábamos más, más lo reconocía. Al divisar ese especial en específico, y como estaba rodeado por los árboles quedando libre del centro, estuve segura.

Es el invernadero bajo la tornera que encontré con Neville, no cabía duda. Pero, ¿porque tanto misterio por esto? ¿Porque esta Neville aquí y no en los invernaderos de la escuela?

Inmediatamente me gire hacia ellos, así como me acerqué de manera amenazantemente, con mis miradas llanas de furia por no entender algo, y peor aún si sabía que estaba relacionado con problemas.

-¿Que hicieron?-pregunté con la voz más grave y alta que de costumbre, haciendo que sintiera el cambio en mi garganta.

Horas antes...
P.O.V Neville

Me levante muy entusiasmado, metiendo el regalo de Sarah en una pequeña caja verde Aqua, combinado con listón azul cielo. Se veía lindo.
Era tan pequeña que cabía perfectamente en el bolsillo de mi abrigo, se lo daría más tarde. En el momento indicado.

Había tenido suerte con lo de Hannah, y todo gracias a ella. Se dispuso a ser amable, tanto que fue sorprendente...pero no dire eso, o sabrá que las estuve espiando.

Le dijo que yo iría al Yule ball con una amiga, y también que me sentía triste como para relaciones, y que la apreciaba mucho como una amiga como para arruinar esa larga amistad por ser adolescentes inestables. Había algo de verdad en eso, pero omitimos lo más importante. Hannah no me gustaba, quizás me atraía, y realmente era linda, pero no era...no era ella.

Este amor aturde como mandragora Donde viven las historias. Descúbrelo ahora