New rules ┋ TruTen

Extra | New Rules 28

⚠ ¡Atención!⚠ De ante mano, aviso que tanto Gohan como Pan no tienen alguna relación sanguínea con Goten, Goku o Milk, lo he dejado claro en todo el fic, pero quiero evitar comentarios respecto a esto y dejar de lado dudas.

Contenido del capítulo:
- Una escena e x t r a.
- Pareja principal: PanMar. MarPan. (como se les antoje llamarle ( ͡°³ ͡°))
- Pareja secundaria, mini historia extra.
-Genero: YURI.

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Pan se recostó en el fresco suelo de madera de la habitación de su novia, este rápidamente hizo contraste con su cuerpo tibio haciéndole tener un escalofrío, el día era totalmente de mierda, odiaba el calor, le hacia estar más caliente que lo usual, y no era que amara el frío pero prefería mil veces congelarse el trasero a sudar por todas partes extravagantes de su cuerpo. Así es, todas.

Así que, en cuanto vio la temperatura de ese día, corrió rápidamente hacia su única salvación: La habitación con clima de su amada novia. No importaba si afuera el Polo Norte se estaba derritiendo, en esa habitación no se sentía ni el más mínimo cambio de temperatura.

Su pareja había bajado por algunos aperitivos, y la había dejado ahí sola, tratando de luchar contra el golpe de calor que su cuerpo sentía y en cierta manera era una exagerada porque para cuando Marron volvió, ella ya estaba más fresca que una lechuga, sin embargo, aun así le gustaba jugar con la débil mente que tenía su rubia.

—Oh Marron, estoy tan caliente.— Pan no esperaba que ella lo captará de una, pero fue grande su sorpresa cuando vio como las pequeñas y lindas orejas de la rubia se volvían totalmente rojas, y poco después sus mejillas parecían querer competir contra los tomates. Esto solo le causó risa y unos buenos golpes de su novia por la broma que le había hecho.—Pero ya, bueno, sal de la habitación.

—¿Qué? ¿Por qué?—Cuestionó esta con duda.

—Porque me calientas más que el sol, chiquita.

Y de nueva cuenta, los golpes con la almohada llegaron a su rostro, Marron prácticamente convertida en un tomate gigante le atacaba sin siquiera poder contener su vergüenza dentro de ella, mientras que no podía contenerse al reír de lo tierna que a veces la rubia podía llegar a ser. Dio un suspiro y sostuvo con fuerza la esponjosa arma con la que habían sido atacada, y sin previó aviso, acerco su rostro al ajeno.

Tan cerca que pudo sentir la respiración de su pareja pegar contra su rostro, y si, era uno de los pocos placeres de la vida poder besar a marron cuando quisiera sin ser detenida en el acto por su novia. Pero cuando estaba apuntó de poder hacerlo, la puerta de la habitación se abrió de golpe y su cuerpo se tenso a más no poder, dejándola estática en su lugar.

—Hija, ¿has visto…?—La mamá de Marron había entrado a la habitación, y en cuanto les vio, las miro con curiosidad mientras arqueaba una ceja.—¿Interrumpo algo?

Pan solamente pudo escuchar un pequeño chillido proveniente de su rubia y posteriormente sintió un golpe en su cabeza, pues esta la había empujado y había regresado al suelo lo cual la hizo golpearse. Un pequeño quejido salió de su boca y con su mano, acarició el lugar en el que se había golpeado, sintiendo como este punzaba. Su novia de un momento a otro comenzo a ponerse más pálida de lo que ya era, la rubia mayor solo dio un largo suspiro para sentarse en el suelo frente a ellas, con su rostro inexpresivo como comúnmente lo tenía.

Y aunque Pan fuera una persona impulsiva y rebelde normalmente, delante de dieciocho no podía serlo, porque de alguna u otra forma, aquella mujer tenía un porte imponente e imposible de evadir. Un escalofrío recorrió su espalda cuando la mayor le miro, se maldecía internamente no ser una persona normal y no comportarse como una persona nerviosa lo haría, porque si ya era impulsiva, nerviosa lo era más.

—¿Y bien?—cuestionó. Pan solo le dio una mirada cómplice a Marron, su pareja la miro con esos ojitos que comúnmente hacia para obtener todo lo que quería, y la azabache mentiría si dijera que era fuerte ante ese encanto, pero en realidad, cuando la rubia la miraba de esa manera, quería darle el universo entero, así que solo respiro hondo, pues sabía que era lo que le pedía: que ella fuera quien lo dijera. Vaya pareja que se había conseguido.

—Bueno, la verdad es que… ya sabe…—Carraspeo nerviosa, tratando de controlar todos esos sentimientos desastrosos que había en su interior.—Marron me sedujo.

—¡Pan!

—Cariño, es la verdad, debemos hablar con la verdad con tu mam-

—¡Mentirosa! ¡Mientes! ¡Y lo sabes!

—Bien— Interrumpió— déjame ver si entendí, ¿Tú y mi hija están saliendo?—todo se quedó en un pequeño y prolongado silencio.

—Efectivamente, suegra.

Afirmó la azabache asintiendo con sus ojos cerrados y con porte orgulloso, aunque la madre de Marron diera miedo, sabía que no las juzgaría como muchos lo hacían, pero incluso así, no tenía idea si estaría de acuerdo en aquello, simplemente hizo lo que nunca había hecho, rezo en su interior. Una pequeña risa se escucho por parte de ella, cosa que la incito a abrir sus ojos.

—Ya lo sabía.—Mencionó la mayor, y ambas no evitaron reír con nervios.—Quería saber hasta donde podían ocultarlo, no son para nada discretas.— Pan sintió que por fin podría respirar con normalidad, pero el rostro serio y frío de su suegra, le dio a entender que algo no estaba del todo bien.— pero lo siento, no puedo apoyarlas.

—¿Qué? ¿Por qué, mamá?—Expulso de repente su pareja, quien veía como su madre se levantaba del suelo para salir de la habitación.

—¿Tu papá lo sabe, Pan?—Los ojos azabache se abrieron de par en par al escuchar esa pregunta, mas no respondió. —Lo suponía, lo siento, pero no voy a apoyar algo que a la larga le hará daño a mi hija, espero me entiendas, Pan, no es nada contra ti.

Y la mayor salió de la habitación sin decir más, sin embargo, estaba claro que tenía razón. ¿En que demonios estaba pensando? Sabía como era su padre, algo así nunca lo permitiría y como lo había dicho dieciocho, a la larga solo le hará daño a Marron, pues cuando su padre se enterara, lo más seguro es que no le permitirá estar con ella…

—¿Pan? ¿estas bien, cariño?

¿Pero que podía hacer? Cuando aquellos ojos azules la miraban como si fuera lo mejor del mundo, con ternura, con amor y cariño, esos ojos que miraban todos sus defectos pero aún así, la seguían amando tal como era. No merecía a Marron, lo sabía, y también sabía que era una persona egoísta, porque si la rubia no era de ella, no iba a ser de nadie.

Y que lastima, porque ella jamás se rendía.

❁

Esta bien, me declaró culpable, amo escribir al personaje de Pan (˵ ͡° ͜ʖ ͡°˵) llevaba muchísimo tiempo que no escribía a un personaje tan cínico, impulsivo y coqueto, escribirla me da + vida. 
Aún no estoy completamente segura de si seguiré su historia y publicaré más capítulos sobre ellas. A tenido muy buena aceptación esta pareja, Pan es tan djshakaj, que sé que les encanta JAJAJ pensaré más acerca de esto, y cuando termine la historia subiría los extras de ellas. Nada seguro.

Como dije, cuando termine la historia, sí, ya esta por terminar 　(இдஇ; )  les avisare cuando los capítulos se reduzcan a dos.

Gracias por leer este capítulo ❤
Besitos voladores pq covi, ¡cuídense mucho!

Cofcoflas invitó a pasar por mis otras historias, es gratiscofcof