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-¿TontoJin? ¿En serio Namjoon?

-Yaaah déjame no se me ocurrió nada mejor.

-Pero ¿TontoJin? Eso es como de primaria.

-Bueno, no es como si el cerebro de Seokjin se haya desarrollado más allá de los 9 años - alegó Namjoon soltando el libro que mantenía en sus manos, para después cruzarse de brazos.

Jungkook lo miraba desde su lugar sentado en el suelo con piernas cruzadas y el mando de la Xbox  descansando en su muslo -  pero y después de eso ¿ya no volvió a molestarte?

-Agggh - Namjoon hizo un sonido con su garganta y se llevó las manos al cabello exasperado - todo lo contrario, me tocaba la oreja con el lápiz, me susurraba y soplaba en el cuello, es tan malditamente molesto. Por favor Kookie vuelve conmigo - finalizó con sus manos juntas implorando al pelinegro y agregó un pequeño puchero por si acaso.

-Yo que tú me lo tiraba -agregó Jungkook como si nada.

-¡¿Estás loco?!

-¿Que? Seokjin es guapo, además es de los que usa y desecha, probablemente después de tenerte no te volverá a molestar.

-¿Que sabes tú de usar y desechar? Eres Virgen.

Jungkook se encogió de hombros y agregó casualmente - Solo porque tú no me hiciste el favor.

-Que asco, eres como mi hermano.

-¿Sabias que el incesto es completamente aceptado en algunas culturas? - Jungkook enarcó ambas cejas.

-No en la nuestra, ahora ¡basta! Vine aquí para otra cosa.

Jungkook bufó y apagó la consola para ir a trabajar a la mesa del comedor ya que era más grande para poder realizar la maqueta del coliseo Romano que les habían dejado como tarea en historia.

-¿Por que trabajamos un viernes? Tu si que sabes como quitarle lo divertido a la vida - reclamó el pelinegro mientras observaba el cartón, cutter, pegamento y los muchos papeles decorados con distintas texturas.

-Me lo agradecerás cuando el fin de semana no tengas que preocuparte por nada.

-Igual no me iba a preocupar hasta el domingo en la noche.

A pesar de la resistencia de Jungkook comenzaron a avanzar rápido con el proyecto, incluso luego de quince minutos Namjoon se sentó y se cruzó de brazos dando instrucciones a Jungkook de cómo debería verse la estructura.

-¿Que se siente que tu nota dependa de mi esta vez?

Namjoon se balanceó un poco en la silla y puso sus manos en la nuca en una posición relajada - Alguna vez tenía que ser tu turno.

-Estás en mi manos. Podría decirle a la profesora que no hiciste nada.

Namjoon volvió a su posición erguida y alzó una ceja - ¿Estas seguro? El miércoles hay examen de inglés.

Jungkook sopló un poco el pegamento en el palito que tenía en sus manos antes de ubicarlo en la maqueta - Por eso digo que mejor sigo trabajando.

[**]

El lunes por la mañana los alumnos de último curso entraban con sus maquetas en las manos, entre ellos Kim Taehyung que sostenía una representación a escala de la muralla china. Se sentía orgulloso del trabajo realizado ya que lo había logrado hacer en medio de las peleas de sus hermanos pequeños y además solo, porque había sido el único del salón en quedar sin pareja y aunque la profesora le dijo que podía aceptar un grupo de tres, Taehyung ni siquiera lo intentó, desde que había entrado en esa escuela hace tres meses, no había logrado hacer ningún amigo.

A lo lejos pudo ver como Hoseok y Seokjin, dos de sus compañeros más populares, entregaban dinero a una chica y ella les entregaba a cambio una maqueta de la catedral de Notre Dame, tan bonita, incluso tenía pequeñas gárgolas en el techo.

Estaba perdido mirando aquel trabajo que no se dio cuenta que Hoseok habia dejado la maqueta en manos de Seokjin e iba directo hacia él.

-Uy pero que bonito - dijo sarcástico tomando uno de los muñequitos de lego que había puesto como decoración subiendo por el camino de la muralla china. Si, eso se le había ocurrido a él solito y se sentía orgulloso, porque era el único trabajo así.

-Ten cuidado, me gustó mucho, puedo llevarme  estos para jugar en casa - añadió Hoseok dejando el juguete de vuelta en su lugar.

Taehyung se sentía nervioso en presencia de Hoseok, porque este era un misterio para él, lo molestaba y se vivía riendo a costa de él y hacerle bromas, pero nunca iba más allá, lo que lo mantenía en una incertidumbre constante de  hasta donde podía llegar.


Después del primer receso Namjoon y Jungkook eran los primeros en ingresar al salón o eso pensaban, ya que adentro se encontraron con un muchacho de anteojos llorando en silencio, arrodillado frente a lo que parecía haber sido una maqueta en el pasado.

-Jungkook no - dijo inmediatamente Namjoon al ver que su amigo lo observaba con ojos de cachorro.

Jungkook no dijo nada, simplemente intensificó su mirada, desviándola un poco hacia arriba, ojos grandes, brillantes casi como si se fuera poner a llorar y como broche de oro, su labio inferior sobresaliendo en un puchero.

-Aiiish está bien - se dio por vencido Namjoon y siguió al pelinegro que ya estaba agachado consolando al nuevo.

-Hey no te preocupes ¿lo hiciste solo, verdad?

Taehyung asintió, sin poder formular palabras, su trabajo en el que había invertido muchas horas, ahora estaba totalmente destruido.

-Le diremos a la profesora que cuando terminó su clase, nos acercamos a ti y te invitamos a trabajar con nosotros, esa de ahí es nuestra maqueta - apuntó su perfecta representación del coliseo romano.

-Gracias - murmuró el chico nuevo. No podía permitirse ser orgulloso cuando era un alumno becado y su matrícula dependía de sus notas.

-¿Tienes alguna idea de quien fue?

Taehyung lo pensó por unos momentos, no quería mentirle a Jungkook, era el primero que se le acercaba de forma amable - Creó que fue Hoseok.

El pelinegro no se hizo esperar y salió corriendo con Namjoon detrás que le decía que no lo hiciera.

Cuando estuvo frente a Hoseok, le dio un fuerte empujón haciéndolo trastabillar sin llegar a caer, solo porque Jimin lo afirmó.

-Llegaste demasiado lejos esta vez Hoseok.

-¡¿De que mierda hablas?!

-No te hagas, el chico nuevo, rompiste su maqueta.

-¡¿Que?!

Hoseok paró de forcejear y Namjoon se iba a acercar para sacar a su amigo de ahí, el chico no lo había hecho, él estaba seguro y quería decírselo a jungkook desde que salió corriendo del salón.

Sin embargo no pudo avanzar ni dos pasos cuando unos brazos lo sujetaron desde la espalda, rodeándole el pecho.

-Seokjin, suéltame - habló en voz baja y calmada.

-Ni lo sueñes - susurró en su oído mientras movía las manos de arriba hacia abajo por su abdomen. -No te dejare pelear, bebé.

-Idiota no estoy forcejeando, deja de hacer eso niño raro.

Tomando a Jin por las muñecas lo hizo separar las manos de su cuerpo y agachándose empujó contra su entrepierna alejándolo al fin de su cuerpo para avanzar hasta Jungkook y sacarlo de ahí antes de que se zafara de los brazos de Jimin y terminara con una suspensión por golpear a un compañero.

¿Tenemos química? - (NamJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora