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Hoseok alisaba con sus dedos el cabello de Taehyung mientras pensativo miraba hacia el techo.

Estaban acostados en su cama, con Tae recostado sobre su pecho disfrutando de los pocos minutos de paz que le daban sus hermanos pequeños.

Era un desastre cada vez que quedaban juntos ya que ambos tenían familias grandes y niños correteando por todos lados, lo que hacía difícil la intimidad, por lo tanto la mayoría de las veces preferían irse al parque.

Sin embargo Taehyung siempre estaba alerta, mirando hacia todos lados por si se encontraban alguien de la escuela y francamente la situación estaba cansando a Hoseok.

—¿Pasa algo? —Preguntó Tae al escuchar suspirar por quinta vez a Hoseok.

—Nada... —Volvió a decir pero se Interrumpió a si mismo y cogiendo aire, tomó a Tae por la barbilla para que lo mirara hacia arriba —En realidad, quiero saber si sigues inseguro acerca de esto.

Taehyung arrugó el entrecejo con extrañeza y dudó por algunos segundos —No... quiero decir llevamos dos meses y eres lindo conmigo, en realidad lamento haberte juzgado antes del tiempo, pero tampoco es que me lo hicieras fácil... Lo que quiero decir... el punto es... que te quiero Jung Hoseok.

Hoseok sonrió y besó la frente de Tae —–Yo también te quiero y me gustaría que todos lo supieran.

Fue casi imperceptible, pero Taehyung se congeló por un par de segundos y desvió la mirada.

—Pero así estamos bien, ya sabes, tus amigos, mis amigos...

—Ellos no importan Taehyung, si nosotros nos queremos y ellos nos quieren a nosotros nos van a aceptar ¿O es que acaso te avergüenzas de mi?

—No, no es eso —Tae se apresuro a negar y después de un momento en silencio suspiró resignado —Esta bien, vamos a mostrarnos juntos en la escuela, solo dame una semana para hablarlo con Kookie y Nam.

Hoseok volvió a sonreír y besó profundamente a Taehyung, aprisionando sus manos por sobre su cabeza cuando traviesamente subió sobre él.

Ellos no habían llegado mas allá de los besos y no solo por la falta de momentos a solas, si no porque Taehyung nunca había salido con nadie y Hoseok no quería presionarlo. Sin embargo, los besos cada vez se hacían mas profundos, mas largos, mas húmedos y sus manos se comenzaban a mover por el cuerpo del contrario con impaciencia, con ganas de llegar un poco, solo un poco mas allá, poder sentirse cuando sus respiraciones se agitaban y el aire parecía escasear si no se tocaban en su totalidad.

—¡Hobi! ¡Hobi! ¡Byul se comió tu trozo de pastel y no me dio nada por mi silencio!

Apenas alcanzaron a separarse cuando un niño entro como un torbellino en la habitacion, siendo seguido por una niña con un par de coletas disparejas y la cara manchada de crema y lo que parecían ser fresas.

Haciendo acopio de su paciencia Hoseok se levantó preguntándose una vez mas por que no solo arreglaba el seguro de la puerta y ponía un candado o de preferencia unos cinco para que sus pequeños demonios disfrazados de hermanos dejaran de interrumpirlo y llevó a Byul hasta el baño para lavarle la cara y regañarla por comer fuera de horario y además algo que no era suyo.

Mientras Tae sonreía mirándolo desaparecer con sus hermanitos. Era verdad que Hoseok lo habia sorprendido de grata manera, porque lo cuidaba, era optimista, paciente, cariñoso y ademas guapo.

Estaba bastante seguro de que lo quería, solo esperaba que Namjoon y Jungkook lo entendieran, porque tampoco queria perder su amistad que aun era reciente y sabía que Hoseok y su grupo no se llevaban con ellos.

¿Tenemos química? - (NamJin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora