(Saltos temporales porque soy un asco relatando muchas cosas en un mismo tiempo, noticias que capaz alegren su corazón y montaña rusa que irá hasta bien arriba.)
(Canción recomendada para leer este fragmento: Arcade – Duncan Laurence.)
POV Yuriko.
-No puede ser. -Miraba aquel pequeño artefacto que presentaban dos líneas rojas verticales.
- ¿Te encuentras bien, Yuriko-san? -Se escuchó la voz asustada y alarmada de la pareja de Atsumu a través de la puerta.
-Shoyo, llama a Tsumu, es urgente. -Comenté algo desesperada, sin salir aún de aquella fortaleza.
Escuché los pasos alejarse hasta simplemente perderse, mis manos aún temblaban aquel test de embarazo, aquella prueba de la semana apasionada que había tenido con Shinsuke para nuestro aniversario de compromiso en diciembre.
Positivo.
Saber que estaba en cinta, a dos días de graduarme de la universidad, provocaba que mis nervios aumentasen, ahora podía explicar la ausencia de mi periodo y los mareos extraños, marzo traía noticias arrasadoras.
Y ahora me pregunto el cómo se lo tomará el peli plata.
El como la noticia de "tengo siete semanas de embarazo, seremos padres" vaya a afectar en algo.
Largos y sepulcrales minutos habían pasado, y seguía sentada en las frías baldosas del baño, terca a salir de esa habitación, hasta que los toques en la puerta me sacaron de la marea de sentimientos que comenzaban a llenar mi mente.
-Tsumu dice que vendrá lo más rápido posible, no le pude decir exactamente la razón, ya que tampoco lo tengo claro -habló dulcemente el peli naranja- ¿podemos hablar de lo que sucede, Yuriko-san?
Con aquella lentitud que impuse al levantarme y abrir la puerta, pude ver sus ojos caramelo, preocupación y ansiedad era lo que reflejaban totalmente aquellas farolas totalmente brillantes.
Las mismas farolas que atraparon a Atsumu Miya.
Hinata Shoyo, un chico de cabellera naranja, compañero en la MSBY y pareja del rubio, desde el último partido que jugó Karasuno contra Inarizaki (era el segundo partido, al cual no pude asistir por el accidente del desmayo) cuando Miya tenía 18 años.
Él quedó atrapado en esos saltos sorprendentes, en esa hambre que producía al hacer algún punto, en la simpatía y pasión que ambos compartían por aquel deporte que amaban, a Atsumu le tomó dos o tres meses en dar los pasos correspondientes.
Donde el corazón del rubio comenzó a latir por el chico de perladas sonrisas.
Donde el "me gustas" pasó a un "te amo".
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Querido Shinsuke (Kita Shinsuke x OC)
FanfictionDónde el amor se debe plasmar en papel y letra pulcra. Y se debe callar bajo la máscara de la amistad. ¿Por cuánto tiempo se podrá mantener el silencio de aquel amor naciente hacia su amigo de infancia y actual capitán del equipo de voleibol? * .:。✧...