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—¡Basta! ¡Me haces cosquillas! ¡Basta!

Win se revolcaba sobre la cama de Bright, cubriendo su estómago con sus manos a pesar de que su disfraz podía protegerlo.

— Dilo Win... — El castaño dejó en paz a Win por un momento. Estaba sobre el, con sus piernas a cada lado del chico. — Tienes que prometerlo.

—¡De acuerdo! ¡Lo prometo!

Bright se acercó a su rostro y entre cerró los ojos.

—De todos modos, le diré a Tawan que...

—Que me cuide... si, si, es mi niñera particular desde hace mucho. — Hizo un puchero que al castaño le causó ternura.

—Chico listo. —Se acercó a sus labios y los besó lento.

Tuvo que detenerse antes de lo que hubiese querido, de lo contrario, Win no llegaría a la fiesta ni el a la cena con su familia.

Que bien sonaba esa palabra en su cabeza.

Familia...

Por fin, tal vez todo estaría como antes.

Se levantó y extendió una mano a Win para ayudarlo a ponerse de pie.

—Igual no pensaba consumir alcohol, esa es una de mis metas.

Bright le miró con orgullo.

—La vas a lograr, mi amor. —Acarició su cabeza. —Eres fuerte y valiente para todo lo que te propongas.

Nuevamente un beso.

Win amaba lo libre que sentía desde que él y Bright podían besarse todo lo que quisieran sin culpas ni remordimientos.

Amaba a Bright.

—Vamos, llegaremos tarde y no quiero hacer esperar a mi mamá.

El entusiasmo no podía quitarse de la cara de Bright, sus expectativas eran bastante altas.

Una vez llegaron a casa de Earth, el castaño tuvo que despedirse de su novio. Solo iba a dejarlo ahí y el se enfrentaría a lo que sea que fuera a pasar en esa bendita cena.

—Le diré a Tay que me lleve a casa, así puedes disfrutar la cena con calma.—El pelinegro quitó su cinturón de seguridad.

—Aún así estaré pensando en ti. —Sé acercó para besarlo.

—Y yo en ti. —Habló sobre el beso. —Cuando estemos en casa retomaremos algo que no terminamos hoy.

Bright soltó una risa y se alejó un poco de su novio. Mordió su labio inferior y le dio un vistazo con los ojos llenos de deseo.

—Será un placer desvestirte, pequeño conejo sexi.

Win sintió el rubor en su rostro y simplemente sonrió.

—Mix me las pagará. —Subió de inmediato a su cabeza la capucha con orejas de conejo que tenía su traje. —Mira que vestirme de conejo solo por no estar presente en su dichosa fiesta. —Miró a Bright. —Te salvaste.

—Bueno, puedo asegurarte que nadie se ve como tu dentro de un traje de conejo, eres el único que se ve tremendamente sensual... —Win sintió que su cuerpo se calentaba con esas palabras. — Si no tuviera una cena, juro que te robaría ahora mismo y te llevaría a...

—¿Vas a bajar algún día? —Un grito se escuchó desde afuera, Mix en disfraz de faraón egipcio con colores dorado y detalles negros y azules, lo veía desde ahí con una mano en la cintura.

Bright agradecía no haber bajado los cristales, de lo contrario ese chico hubiese escuchado sus más profundos deseos.

—Te veré más tarde amor, salúdame a tu madre. —Win se fue sin vergüenza alguna a los labios de Bright y dejó un beso muy tierno.

Mejor Amigo | BrightWin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora