Emma y Ruby camina directas a Granny's, la rubia va con una gran sonrisa en su cara, por alguna razón había cambiado su mentalidad. Cómo iba delante abre la puerta y cede el paso a la camarera. Al entrar ven que todas están ya sentadas, Regina y Danielle en un lado mientras que en el otro esta Bella, Ruby se coloca a su lado y Emma acerca una silla y se coloca a presidir la mesa con una gran sonrisa.
-Siento lo de antes, he tenido un aviso.- Dijo tranquilamente pero mirando a los ojos de Regina que no se cree nada.
-¿Y ya lo has solucionado?- Dijo esta que le había enfadado la inmadurez que Emma había demostrado hacía un rato.
-Por suerte era una falsa alarma.- Contesta fingiendo tranquilidad.- No me he presentado, soy Emma Swan la sheriff, ¿Tú eres?- Dijo mirando a Danielle a los ojos.
-Soy Danielle, la novia de Regina.- La mira de arriba abajo y acaba cogiendo su mano.
-Encantada. Has tenido muy abandonada a tu novia estas últimas semanas.- Soltó provocando que Bella y Ruby se atragantaran con sus bebidas.
Ruby dio una fuerte patada a la rubia que ni se inmutó con el contacto, por el contrario siguió mirando fijamente a Danielle aunque también veía a Regina bastante molesta y matándola con su mirada. Emma soltó una carcajada ante la incomodidad de todas y se levantó.
-Era una broma... voy a pedir.- Dijo dejando la mesa en ese momento y dirigiéndose a Granny para pedir su almuerzo.
Tras pedir la comida se marchó un segundo al baño quería lavarse un poco para poder seguir con el juego. Justo cuando iba a abrir el grifo la morena entró dejando que la puerta se cerrase y haciendo que diese un fuerte portazo. Regina daba realmente miedo, sus ojos oscuros por la rabia y sus labios fruncidos, pero Emma no se amedrento y sólo sonreía.
-¿A qué ha venido eso?- Soltó Regina acercándose un poco para no tener que gritar demasiado.
-¿El qué?- Pregunta la rubia inocentemente mientras se lava las manos.
-No me gustan tus jueguecitos, sheriff.- Dijo mirándola directamente para intimidarla.
-Lo siento pero no creó haber hecho nada malo- Se giró para secarse las manos cuando notó que Regina la cogía del brazo y la hacía girar para obligarla a mirarla a los ojos.- No pensé que estaría tan fuerte, felicidades.- Dijo irónicamente soltándose de un tirón.
-No sé a qué juegas pero conmigo te has equivocado.- Regina se giró y estaba a punto de marcharse cuando la rubia habló.
-Tranquila, ese beso te gustó tanto como a mí, pero te aseguro que el próximo me pedirás, me rogaras que te lo de.- Soltó Emma esquivando a la morena y saliendo ella antes.
Odio a esta mujer, es una impertinente. Pensó mientras se limpiaba un poco la cara. ¿De verdad piensa que le voy a pedir un beso? Esto loca. Es una niña en cuerpo de mujer. Su enfado era más que considerable. Tras unos minutos manteniendo esa pequeña conversación en su mente salió del baño.
-Ya han traído la comida.- Dijo Ruby disfrutando de su grasienta hamburguesa.- Prometo que mañana saldré a correr y me quemaré las 1000 calorías que tiene esto.- Dijo provocando la risas de las allí presentes.
-Creó que si avisas a Dorothy estaría encantada de ayudarte con eso.- Soltó Emma dando un bocado a su hamburguesa.
-¡Emma!- Gritó Ruby.- ¿Cómo lo sabes?- Preguntó bastante confundida.- La conocí el otro día en el baño del Rabbit Hole, digamos que intenté tirármela pero me dijo que estaba contigo. Es un buen partido.- Sentenció Emma que decía la verdad-
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Las apariencias engañan.
FanfictionRegina Mills es trasladada al hospital de Storybrooke donde deberá trabajar durante un año, al llegar conocerá a la atractiva y poco convencional Emma Swan. Ambas son polos opuestos pero no podrán evitar sentirse atraídas por la otra. ¿Se quedara en...