"MI NÚMERO DE CONTACTO ES..."

Capítulo 31: "Aclarando malos entendidos - Parte II: Una proposición"

Un apuesto joven de cabello alborotado miraba con nostalgia a un gigantesco hombre que cubría con sus manos su rostro mientras hablaba con voz quebrada.

No puede ser cierto, no puede ser cierto, decía el gigantesco hombre.

Lo lamento maestro, no me da gusto darle una noticia así, pero ello es la verdad, acotaba Gokú, haciendo una pausa para acotar: Milk lo andaba buscando, yo jamás imagine que usted era su padre......

En tanto:

Una pelinegra era abrazada por su amiga en el umbral de la puerta del lugar donde vivía.

Me dejaste impactada por todo lo que me comentaste por teléfono, por ello estoy aquí, decía Vados.

¡Gracias! te hice salir de tu trabajo, respondía la pelinegra.

No te preocupes, luego regreso a concluirlo, mejor platícame mejor todo eso que me contaste por teléfono, dijo Vados, rompiendo el abrazo.

Bien, pasa, respondió Milk, mientras caminaba hacia uno de los sofás.

¿A qué hora tienes trabajo?, acotó Vados.

Hoy no trabajaré, le pedí a Sayuri que me disculpe con el cliente, y que si él gusta le envíe otra acompañante, no me siento bien, tengo tantas inquietudes en la mente, agregó la pelinegra.

Te comprendo, dijo Vados, mientras tomaba asiento frente a su amiga.

Café:

Mañana, decía un gigantesco hombre.

Sí maestro mañana en este mismo café a estas horas, respondió Gokú.

Bien, será como ella quiera, dijo el señor Ox.

Ella pensaba que abandono a su madre, ella estaba muy resentida por ello, pero yo le confesé algunas cosas que usted me compartió de su pasado, lo hice para que ella comprenda que usted no quiso abandonar a su madre, que usted cuando estuvo con su madre no estuvo con otra persona, acotaba Gokú.

No comprendo, ¿Quién pudo decirle que era casado?, decía el señor Ox.

No lo sé maestro, a veces hay gente que no le gusta la felicidad de otros, respondió Gokú.

Sí, es cierto, y te acusan de cosas injustas como lo hicieron conmigo, decía el señor Ox con nostalgia.

Departamento de Milk:

Vaya, tu padre resulto ser el maestro del bombón, decía Vados boquiabierta.

Sí, pero hay más, respondía la pelinegra.

Ya imagino lo que me vas a decir, eres media hermana de Hit, aunque él me dijo que no era hijo de sangre de su padre, acotaba la joven.

Veo que él te tiene mucha confianza, dijo Milk.

Somos amigos, y ya te dije que me gusta, además él ya sabe cómo me llamo de verdad, conoce mi pasado y no me rechaza, respondía Vados.

Me da gusto por ti, decía Milk.

Milk, no vayas a alejarte de tu felicidad por algo que es parte del pasado, acoto Vados.

¿Qué?, dijo la pelinegra.

Te conozco Milk, se cómo eres, de seguro ahora que sabes que la ex del bombón lleva tu sangre estás confundida, no sabes cómo actuar, pero como bien dice un dicho lo "Lo pasado es pasado", respondía Vados.

Tras algunos más minutos de platica con su amiga, esta se marchó del departamento y dejo sola nuevamente a la pelinegra.

Mañana te conoceré, padre, pensó Milk.