Una pelinegra abordaba un auto deportivo, mientras un apuesto joven de cabello alborotado la miraba embelesado.
¿Qué sucede?, no estoy vestida de manera apropiada para la ocasión, decía Milk preocupada.
Como siempre estás perfecta, respondió Gokú, haciendo que la pelinegra gire su rostro.
Creo que es momento de partir, ¿no?, dijo Milk.
Sí, ahora enciendo el auto, respondió Gokú, haciendo una pausa para agregar: No te compre alguna prenda para hoy, pues Sayuri me devolvió las prendas anteriores que te compre para nuestras citas, entonces pensé que tal vez ninguna fueron de tu agrado.
Las prendas estuvieron muy lindas, pero no me gusta recibir regalos de mis clientes, menos ropa, dijo la pelinegra.
Comprendo, no volveré a comprarte nada si no lo deseas, de igual manera la ropa que la compre pensando en ti, las guardare en tu closet, respondió Gokú.
¿En mi closet?, dijo confundida la pelinegra.
Si tú en mi departamento tienes un closet, solo con las ropas que compre para nuestras citas y que tú me has devuelto, confió en que volverás a usarlas en otra oportunidad, respondió Gokú sonriendo, al tiempo que manejaba.
Tiempo después:
Un par de pelinegros bajaban de un auto a mitad de un puente.
Este es el "Puente Dragón", desde aquí veremos el más bello atardecer de la ciudad, decía Gokú.
Ya lo creo, respondió Milk, mirando el maravilloso paisaje.
Como te vine comentando este es un puente turístico, son pocos los vehículos que entran a este, decía Gokú.
Sí, ya lo noté, hay muy pocos autos y todos parecen ya tener una ubicación delimitada, respondía Milk.
Así es, para visitarlo tienes que apartar tu cupo con semanas previas de anticipación, dijo Gokú sonriendo.
Vaya, respondió Milk, al tiempo que el joven de cabello alborotado caminaba hacia su auto.
¿Qué harás?, dijo Milk.
Te dije que cenaríamos aquí, ¿no?, acotó Gokú.
Sí, eso dijiste, aunque no creo que sea posible, decía Milk, quedándose callada repentinamente al ver al joven de cabello alborotado presionar un botón y hacer que la parte trasera del auto se levantara.
¿Qué te parece?, traje la cena en un canasto,..., acotaba Gokú, mientras la pelinegra miraba un mantel rojo, sobre el mismo un par de cojines.
La pelinegra solo sonrió ante el detalle del joven, quien le devolvió la sonrisa.
Gokú y Milk ocuparon sus lugares sobre los almohadones, el joven de cabello alborotado saco del canasto unos pequeños recipientes y los coloco sobre el mantel, luego saco un par de copas y una botella.
Hagamos un brindis, decía Gokú, mientras servía las copas.
Bien, respondió la pelinegra.
Por el inicio de nuestra amistad, dijo Gokú elevando su copa.
¿Qué?, respondió confundida Milk.
Por el inicio de nuestra verdadera amistad, porque a partir de hoy ella de verdad dará inicio, decía Gokú sonriendo con calidez.
¿Cómo puedes estar seguro de ello?, respondió Milk confundida.
Sencillo, es la primera vez que siento que verdad estás disfrutando de este momento, acotó Gokú.
ESTÁS LEYENDO
"MI NÚMERO DE CONTACTO ES..."
De TodoEl destino los puso frente al otro el último día del año, pero él no solo quiere verla ese día, y menos porque ella solo este cumpliendo con su trabajo, él quiere seguir tratandola y para ello tiene que conseguir su número telefónico. ¿Lo logrará es...