06

1.5K 219 31
                                    

» Te lo mostraré «

Cuando las clases habían terminado, Luz se despidió de sus amigos donde Stev la esperaba tal como había prometido, estaba muy emocionada de contarle al emperador como había sido su primer día, quería comentarle que hizo dos nuevos amigos y que una tal Boscha quien es una alfa, se cree la muy diva.

—Tienes que acostumbrarte a eso Luz, así son los alfas, buscan dominio en todos lados, se creen superiores.

—Estas englobando a todos de una manera muy grosera - soltó con molestia, su cabello no dejaba notar su ceño fruncido pero sus feromonas estaban siendo más fuertes que el supresor, haciendo que el guardia a su lado se inmute de inmediato mostrando nerviosismo-

—Y-Yo...L-Luz

La morena pudo notar los temblores de su amigo, reaccionando así de inmediato y se tranquilizó para soltar feromonas suaves y dulzonas  que calmaron al Omega a su lado.

—L-Lo siento Steven

—Tranquila Luz, como soy omega me afecta más, a pesar de que uso supresores de aroma para que mis demás compañeros no me marginen.

—Prometo, Stev, que cambiaré esa absurda jerarquía

—Esta bien, por cierto, razón tuvieron para tomarte como la hija del emperador, eres igual de poderosa que el, tus feromonas son igual de fuertes que las del emperador, son iguales.

—¿En serio?

Luz estaba feliz que la elogiaran y compraran con Belos, pues para ella no había brujo más impresionante como el, pero una cosa no estaba de acuerdo, no eran iguales, tenían pensamientos e ideas demasiado distintas y por más que quería apoyar de verdad al brujo, no podía lograrlo y sólo le quedaba mentir. Pero claro, no es algo como que le pueda contar a alguien tan fácilmente.

Ya en el castillo, los guardias de la entrada la saludaron dejándoles paso, pudo divisar a Odalia cerca de la puerta, parecía a punto de irse del lugar.

—Lady Blight - saludó feliz-

—Buen día Luz, ¿como te fue hoy en tus clases? - preguntó con cortesía -

—De maravilla Dali, ¿estas a punto de irte? Me gustaría que tomaras sangre de manzana conmigo, será emocionante contarte los detalles y saber de ti, hace mucho no hablamos - sonrió -

—Lamento decirlo pero será para otra ocasión, mi marido y mis hijos han de estar esperándome para la comida - dijo para luego hacer una pequeña reverencia hacia la chica- si me disculpas

—Entiendo, ¡cuidate mucho Dali!

La mayor le dio una sonrisa ladina y siguió su camino fuera del castillo donde en el lugar abierto sacó su palisman y dio vuelo.

—Pensar que una vez casi te mata - dijo Steven de repente-

—Eran tiempos oscuros Stev - rió Luz para seguir cambiando por los pasillos-

Se escuchaban algunas voces cerca de uno de los pasillos donde se encontraba la chica y junto a su amigo siguió aquel pequeño bullicio de voces agudas y una que otra extremadamente grabes.

—Muy bien niños, así concluye nuestro recorrido - era la voz de la pequeña demonio-

Luz asomó su cabeza por un pilar que se encontraba, abrió los ojos en grande al notar a unos pequeños niños demonio, uno de ellos su cabeza era un ojo, otro era rojo y en ver de rostro tenía una gran boca con colmillos, los demás eran mitad animal, solo tenían cuernos o más de un ojo.

Justicia al TitánDonde viven las historias. Descúbrelo ahora