» Nutria «
Los pasos alborotados por parte del ejército de Belos era lo único que se escuchaba por el lugar, los guardias dejaron sus puestos para unirse al batallón mientras que la morena preparaba sus guantes, ya no le veía caso usar su máscara, mostró su rostro sin emoción alguna mientras su capa se movía acorde a su caminar, los soldados hacían reverencia hacia ella pues se había ganado el respeto de todos no por el hecho de ser la protegida del emperador sino por como la muchacha era, pero de cierta manera extrañaban a la chica sonriente que alguna vez fue, ahora solo era un cascarón vacío.
Toda ira o mejor dicho, todo sentimiento le fue arrebatado por aquel que la controla, ahora era nada más que una simple marioneta la cual sabían mover muy bien sus hilos para causar destrucción.
Los rebeldes se preparaban para luchar, incluso la familia Blight se habían metido en el grupo, pues por lo que les contó la castaña antes de su repentino proceso, no seguirían sirviendo a un tirano que busca más poder del que ya tiene, la menor de ellos estaba preocupada por su novia, seguía sin creer que aún no tenían su primer cita a pesar de serlo, pero no había que lamentarse, después de vencer a Belos tendrían todo el tiempo para estar juntas...¿Cierto?
—Es hora, nuestra carta de guerra ya les habrá llegado, así que su ejercito se estará preparando, tenemos que llegar antes y realizar el plan. - habló la dama búho -
—Lilith, espero tu amigo no nos esté mintiendo - dijo Alador -
—Con todo respeto Sir Blight, estoy diciendo la verdad, no quiero que Luz siga como está - habló el chico -
—Steve es de confianza, Alador. Además busca lo mismo que todos los aquí presentes.
El omega asiente feliz y se dirige donde Amity para hablar de la chica como lo habían acordado, la peli verde quería saber como era la morena en el castillo antes de que todo eso sucediera y el guardia quería saber como era su amiga en Hexide.
—¿En serio casi la matas? - preguntó riéndose -
—Jaja si, no sabía que ese era un animal del mundo humano, creí que me comería. Por suerte Kikimora me detuvo.
—Kikimora ¿es alguien importante para Luz?
El omega asiente.
—Ella pasaba más tiempo con Luz que con todos nosotros, incluso cuando conoció a Lilith o a los señores Blight - añadió. — si el emperador es como un padre para ella, Kikimora es como su madre.
—Entiendo, ¿hay alguna posibilidad de que Kikimora nos ayude a recuperar a Luz?
Steve niega. Sabía que la demonio no podría traicionar al emperador tan a la ligera ni mucho menos por la humana, además de que en todos los años Kikimora sólo mostró intereses muy distintos en la morena, como el hecho de hacer quedar muy en alto la imagen de Belos y de lo duro pero entretenido entrenamiento que se recibe en el castillo, fuera de eso, tal vez la humana era la única que había agarrado tanto afecto.
—Hey, ya es hora.
El ejército marchaba hacia el lugar de encuentro, un tanto lejano de la ciudad así como decía la carta, el lugar se encontraba vacío y con nieve, producto por estar cerca de la rodilla, Luz no se encontraba en las líneas del frente, en realidad no se le veía en alguna formación, Belos iba con ellos y a su lado Kikimora, el brujo sólo esperaba paciente el resultado y a la vez entusiasmado por mostrarles a la rebelión cuando poderosa puede ser su más grande creación.
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Justicia al Titán
Hayran KurguUn mundo de magia con criaturas fascinantes. Una joven humana que llega a cambiar todo del mundo que está siendo dirigido por la persona equivocada. Una bruja, heredera de una de las familias más poderosas de las islas, el peso de su apellido es gra...