Frío Carmesí

Capítulo 19

Que farsa.

Espere hasta bien tarde pero mamá nunca llegó.

Ahora ya era de mañana y estaba listo para reclamarle por no haber venido anoche a explicarnos.

Pero para mí sorpresa, al llegar al comedor, me encontré con nada más ni nada menos que el mismísimo emperador junto a la princesa Athanasia sentados con mi familia.

¿Qué hacen aquí?

Cuando mi mirada se cruzó con la de la princesa Athanasia, lo único que se me ocurrió hacer fue saludarlos.

Me senté al lado de mamá, como siempre y me quedé callado hasta que alguien me explicara que era este circo.

Papá se aclaró la garganta, suspiro un poco y dijo.

-Bueno, primero que todo me gustaría agradecerle a su majestad el emperador y a la princesa imperial por haber venido en un momento tan complicado. Ayer por la conmoción no logré explicarle bien a mi familia lo que estaba pasando así que lo haré ahora que estoy más calmado. Como sabrán, este tiempo hemos estado lidiando con problemas con un imperio, ha sido duro pero pensábamos que íbamos por buen camino, pero ayer nos llegó una carta anunciando la visita de la familia imperial de ese imperio a Obelia. No es común que una familia completa venga a firmar unos tratados pero podría pasar. El problema está en que esa familia que vendrá es la familia imperial de Lerissos. El lugar donde nosotros habíamos vivido antes....y creo que ya entienden el porque me angustie tanto ayer.

¿Que vienen quienes?

¿Toda la familia de Lerissos?

Osea...¡¿Podre reencontrarme con la princesa Hallie?!

¡Oh no!¡Pero que maravilloso!

¡Esto es algo que me cuesta asimilar!

¡Esto..esto...es....

Note como la mirada de todos los presentes se oscurecía un poco, era obvio que la idea de que todas esas personas vinieran no era de su agrado.

Ah...

Iba a hablar pero el emperador me interrumpió.

-Ayer, el duque me explicó todo lo que había ocurrido en ese lugar, por lo que entiendo su situación. La llegada de esas personas será pasado mañana por lo que haremos todos los preparativos para que su estadía será rápida y corta. El duque ha hecho un gran trabajo para mi y aunque no lo parezca lo respeto bastante, me parece lamentable por lo que ha tenido que pasar pero quiero dejarles algo en claro. Ustedes ya no están en Lerissos, sino en Obelia y en Obelia mando yo. Soy yo el emperador y si esta familia intenta nuevamente arrastrarlos a ese lugar, tendré que ponerlos en su lugar. Nadie subestima mi autoridad.

Y gracias a esas palabras, tanto papá como mamá se notaron más relajados.

Sabia sobre la buena relación que tiene papá con el emperador Claude pero no pensé que era tan buena.

Eso es bueno.

-¿Y como esta la emperatriz Diana?

Dijo mamá con algo más de libertad.

No solo papá tenía buena relación con la familia imperial sino que también mamá.

Ella se había vuelto muy cercana con la emperatriz Diana, tanto que casi siempre se veían.

-Ella está bien, no pudo venir ya que Jennette no se sentía bien, así que se quedó cuidandola.

-¿La princesa Jennette está enferma?

Dije casi sin darme cuenta.

Es cierto que últimamente no la he visto mucho.

Aún recuerdo lo que pasó y me da algo de vergüenza poder verla a la cara.