Los Parker

CAPÍTULO 37

Sergio estaba tumbado en su cama del hotel en silencio mientras Manu esperaba sentado en la silla consultando su teléfono.

- Hugo está aquí, tiene que hablar contigo- dijo Manu acercándose a la puerta.

- Pues que entre- respondió Sergio sin moverse de la cama.

Hugo entró y se quedó mirando a Sergio que no se había inmutado.

- ¿Por qué no te cambias? Deberías estar ya arreglado- dijo mirándolo con autoridad.

- Tardo cinco minutos- Sergio se puso en pie para ir al baño.

- Espera. Tengo que avisarte de algo- advirtió Hugo. Sergio esperó que continuase- Tenemos un plan para que puedas hablar con ella a solas, pero tienes que estar preparado. Veas lo que veas, disimula y sígueme. Y veas a quien veas, no hagas caso, no conoces a nadie.

- Vale- dijo Sergio sin mostrar mucho interés.

- Sergio, es importante. ¿Serás capaz? – insistió Hugo.

- Soy capaz de disimular, sí. No te preocupes- Sergio se dio cuenta de que estaba siendo injusto comportándose así con las personas que intentaban ayudarle y sonrió- Gracias por ayudarme.

- Entendemos que estés preocupado, no tienes que disimular con nosotros- dijo Manu.

- Lo sé. Voy a arreglarme- dijo entrando al baño.

Desde que Hugo se había marchado no hacía más que darle vueltas a lo que tenía que hacer para solucionar el problema y todo pasaba por quitarle el poder a Edu, pero eso suponía demasiado para él y no estaba preparado. Necesitaba hablar con alguien que pudiera entenderle, alguien que comprendiera lo que suponía perder la privacidad y el anonimato. Liam.

Escuchó a Manu y a Hugo apremiarle para no llegar tarde a la televisión y salió ya preparado para marcharse.

Lo recibieron al bajar del coche y lo acompañaron hasta una salita en la que se reuniría con el presentador y otros miembros del equipo del programa para preparar la entrevista.

Al abrirse la puerta, Sergio sintió su corazón pararse y todo el aire escapando de sus pulmones al ver allí a Lydia junto a Edu. En ese momento los vio como una pareja real y no pudo evitar fijar su mirada en ella buscando a la chica que le dijo que no le había mentido.

Lydia dejó escapar una sonrisa escondida en un gesto de incomodidad y allí Sergio vio a esa chica que había derribado todas sus barreras y lo había hecho vulnerable de nuevo.

- Hola Sergio. Tenía ganas de verte por fin- Edu tendió la mano a Sergio interponiéndose entre él y Lydia antes de que pudiesen saludarse- Llegas un poco tarde, hace ya un rato que esperamos- acusó.

- Hola, he tenido unas cosas que hacer antes de venir- mintió saludando a Edu con una sonrisa. Sergio miró hacia Lydia y se acercó para saludarla con dos besos en las mejillas.

Al acercarse a ella pensó que no sería capaz de disimular. No era capaz de contenerse para estrecharla entre sus brazos y besarla una vez más.

- Comienza la actuación, ¿no? – susurró Sergio al oído de Lydia para que nadie lo escuchara.

- Lo siento - susurró también Lydia.

El presentador entró justo en ese momento y los dos comenzaron a actuar con naturalidad, como si fuesen solo amigos, sin embargo, cada vez que sus miradas se cruzaban Sergio sentía de nuevo toda la atracción que había estado reprimiendo. Pensó que no sería capaz de aguantar toda la entrevista sin tocarla o lanzarse a besarla.