Los Parker

CAPÍTULO 58

TRES MESES MÁS TARDE

Nicky y Jason estaban en el aeropuerto esperando el vuelo en el que llegaban sus hermanos con todas sus familias para asistir a la boda de Sergio y de Lydia.

Habían tenido que acompañarles Borja y Manu con dos coches más para poder llevarlos a todos.

La casa de Sergio era grande, pero con diecisiete personas allí más Sergio, Carlos y Alicia, a pesar de que Lydia estaba en casa de sus padres hasta la boda y Manu y Borja habían alquilado un apartamento, en esos momentos, parecía diminuta.

Había niñas por todas partes y Carlos buscaba cualquier rincón para esconderse un poco de esas pequeñas brujas locas que no se estaban quietas en ningún momento y que no tenían ni una sola idea buena.

Sergio no dejaba de abrir y cerrar cajones en la cocina buscando algo sin saber qué.

- Pareces nervioso. ¿Qué buscas? – preguntó Charlie poniendo la mano en el hombro de Sergio para que se estuviese quieto.

- He olvidado lo que busco. Supongo que sabré lo que es cuando lo encuentre- reconoció Sergio. Charlie le sonrió.

- Pues deja de abrir y cerrar cajones, pareces un psicópata- le dijo Andy bromeando.

- Es que necesitaba algo cuando he llegado y ahora no me acuerdo- Sergio se sentó en uno de los taburetes.

- Supongo que es normal que estés nervioso, pero no te he visto tan descontrolado ni siquiera en tus primeros conciertos- Liam también llegó a ellos.

- No es la primera vez que tomas una decisión que te cambia la vida y esta vez parece que es para algo bueno- Dave se quedó frente a Sergio, que volteó la cabeza para descubrir a todos los chicos Parker a su alrededor.

- Esta decisión no me afecta solo a mí. Está Lydia, no quiero decepcionarla y ahora mismo no sé si estaré a la altura de ser un marido y un padre- Sergio decidió mostrar sus preocupaciones a los chicos.

- Ya eres un marido y un padre, solo vais a formalizar eso. ¿No te ha quedado claro que ella te quiere y quiere estar contigo? – Charlie no dejaba de mirarle a los ojos mientras los demás asentían en silencio.

- Ninguno entendemos que ella te aguante, la verdad, pero algo bueno tienes que tener- bromeó Andy.

- Pues yo todavía no me creo que ella me aguante- rio Sergio.

- Mejor no te hagas esa pregunta. Ninguno tenemos la respuesta. ¿No te has parado a pensar cómo es posible que Alex soporte a Andy? ¿Qué Madison todavía no haya dejado al aburrido de Charlie? ¿Qué Isabella sea capaz de entender a Dave? o que Jason, bueno, en su caso, realmente nadie entiende cómo él soporta a Nicky- dijo Liam riendo. Jason dio un empujón a Liam.

- ¿Y eso me lo dices tú que la llevas soportando desde el útero? – rio Jason.

- A mí no me dieron elección- Liam se encogió de hombros y puso cara de resignación.

- Yo tampoco tuve elección- dijo también Jason tan resignado como Liam provocando las risas de todos.

- Bueno y ahora que sabemos que todos menos este somos unos afortunados y todavía no creemos la suerte que tenemos, es hora de tu despedida de soltero- Andy señaló primero a Jason y después pasó la mano sobre los hombros de Sergio obligándole a levantarse del taburete.

- ¿Qué? No, no puedo irme ahora, los niños...- decía Sergio mientras lo arrastraban hacia la calle.

- Está todo arreglado. Los niños están bien o todo lo bien que puede estar Carlos rodeado de seis pequeñas Parker- dijo Charlie pensando en el pobre niño que pasaba más tiempo intentando alejarse de ellas que jugando.