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Namjoon no se quedaría de brazos cruzados, el no había hecho nada malo, el no era el culpable de que la información para la nueva edición de Jungkook se filtrara hasta la competencia, ni siquiera sabía que Jackson era la competencia.

Estaba dispuesto a encontrarlo y enfrentarlo. No iba a permitir que jugara con el, amaba a Jungkook, realmente lo hacía y no dejaría que la relación se arruinara por su culpa.

Había investigado un poco sobre el, pues no fue muy necesario buscar a fondo para encontrar información que le ayudaría a encontrarlo. Era alguien reconocido, no sabía como fue posible que lo engañara con mentiras patéticas.

Llegó a la enorme empresa y entró hasta llegar a la recepción, donde un chico lo atendió muy amablemente y a pesar de que Namjoon estuviera enojado no se desquitaria con el, pues sabía lo incómodo que podría llegar a ser.

- Hola, estoy buscando a Jackson Wang. - dijo muy tranquilo.

- Lo siento pero para hablar con el necesita tener una cita.

Namjoon se dispuso a buscar una forma de poder entrar pero nada se le ocurrió, además de que no fue necesario debido a que la persona a la que buscaba llegó.

- Vaya que regresaste. - escuchó su voz.

El moreno volteó hacia el y caminó muy decidido hasta estar frente a el. Varios guardias quisieron apartarlo pero su jefe los detuvo.

- Eres un desgraciado. - escupió con rabia.

- ¿Lo soy?

- T-tu le dijiste que fui yo quien te dio la información que tu robaste. - estaba tan enojado que no podía controlar sus emociones correctamente, sentía un nudo en su garganta que le impedía hablar con claridad.

- Vamos a hablar a mi oficina. - quiso tomar su mano pero Namjoon se alejó.

- No. Que todo el mundo se entere de la mierda que eres. - varios empleados comenzaban a ver la escena con intriga.

Jackson se acercó a el y lo tomó por la barbilla, haciendo que lo mirara a los ojos.

- Vamos a hacerlo por las buenas, créeme que te conviene hacer lo que te diga. - le regaló una sonrisa mostrando sus dientes y Namjoon solo pudo ver la hipocresía total. - Tus hermanos deben de estar asustados.

El cuerpo de Namjoon comenzó a temblar de solo pensar en la idea de que les hubiera hecho daño.

- Ahora dame tu mano y caminemos hasta la oficina como una linda pareja.

No quería ceder pero el miedo por sus hermanos era más grande. Hizo lo que le ordenó y caminaron hasta el elevador que los llevaría a la oficina principal.

Llegaron al último piso y salieron del elevador. Jackson saludaba a todos sus empleados con una sonrisa cálida y amistosa, parecía ser el jefe perfecto.

Lo hizo entra a la oficina y entonces Namjoon se soltó de su agarre.

- Ya te divertiste lo suficiente.

- Realmente apenas empieza mi diversión. - una sonrisa cínica se postró en sus labios. - durante años Jeon me ha humillado, el cree tener el poder y control de todo, no hay nadie que domine al diablo, pero ese día en la fiesta... su mirada cambiaba totalmente contigo, parecía que el paraíso perdido estaba en ti. - se dejó caer en su silla sin perder a Namjoon de vista. - te convertiste en su talón de aquiles.

- ¿A dónde quieres llegar?

- Si te tengo a ti, el cae. Namjoon porfavor lo tienes a tus pies, el haría todo por ti. - lo miraba burlesco. - Cuando te ascendió de puesto. ¿Sabes lo difícil que es entrar como escritor para la revista? No acepta cualquier cosa, pero por ti hizo una excepción ¿realmente creíste que lo que escribes es suficientemente bueno?

- No tengo porque seguir escuchando esto.

- Claro que lo tienes... no falta mucho para que la niñera te hable y te diga que los niños han desaparecido.

- eres un mentiroso...

Su celular comenzó a sonar, estaba recibiendo una llamada de Sun. El pánico recorría su cuerpo tenía miedo de que lo que dijo fuera verdad.

- Nam ¿los niños se fueron contigo o has mandando a alguien para que los recoja? - podía escuchar su preocupación.

- No, Sun... dime que están contigo.

- Llegué a la escuela y le dijeron que un adulto vino por ellos y que los niños lo reconocieron por lo que se fueron con el.

- Me haré cargó.

Colgó y corrió hacia Jackson con la intención de golpearlo pero al parecer esperaba esa reacción pues rápidamente las puertas se abrieron y por esta entrarons dos de sus gauardaespalas.

- ¡Eres un maldito cobarde! - forcejeaba para que lo soltaran. - no metas a mis hermanos en tus problemas mentales.

El chico rió como ai verlo sufrir y a punto del desborde fuera el espectáculo más divertido.

- Cásate conmigo y tus hermanos estarán bien.

- ¿porqué me quieres a mi?

- porqué eres quien Jeon quiere y esta vez yo le ganaré. - se puso de pie y caminó peligrosamente hacia el. - Cuando el mire a su amado con otro chico, más específicamente conmigo. - tomó su mentón. - su mundo se derrumbará.

Las lágrimas comenzaban a salir de sus ojos, parecía que no había opciones y es que realmente no había muchas.

- Yo no soy tan importante para el, porfavor déjame a mis hermanos y a mi. - solo le quedaba suplicar.

- mientes. El estúpido de Jungkook no sabe expresarse, no sabe expresar lo jodidamente loco que está por ti. - sabía que estaba débil como para que lo intentara atacar por lo que le ordenó a los de seguridad que lo soltaran.- Se un buen prometido y prepararme un café, estoy seguro de que te gustaba hacerlos para el.

- Mis hermanos...

- Ellos estarán con hasta que el día que nos casemos.

- No, ellos deben de estar asustados porfavor déjame estar con ellos.- lo miraba suplicante.

- Bien, pero pide las cosas como son. Ponte de rodillas y pídemelo.

Namjoon no lo pensó ni un segundo y se dejó caer sobre sus rodillas.

Jackson no podía tener el ego más elevado en ese momento, sentía que la gloria estaba cercas.

- Llévenlo con los niños.

Lo pusieron de pie y salieron de la oficina.

El chico tomó su teléfono y marcó el número del señor Jeon.

- Señor Jeon, Jungkook pronto regresará suplicando por la empresa.

- Haz hecho bien tu trabajo esta vez.

- disfruto haciéndolo.








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Una disculpa por los errores y muchas gracias por leer 💕💕💕








Marry You |Kooknam| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora