Marry You |Kooknam|

23

- ¡Namjoon! - el moreno escuchó el grito apresurado de su amiga desde su habitación, lo que hizo que se alertara.

Escuchó sus pasos apresurados cada vez más cercas hasta que llegó y abrió la puerta de golpe. No decía nada, solo se mantenía parada con los ojos muy abiertos.

- Habla que me comienzas a asustar con esa cara de loca...

- Jin me habló. - soltó corriendo hasta estar frente al moreno.

- ¿cuándo?

- Hoy, lo acaba de hacer. Dijo que tiene muchas cosas que decirme. - dijo muy nerviosa. - ¿debería de ir?

Namjoon podía darse una idea de lo que le diría, ya que su novio le había contado lo sucedido con sus padres, por lo que esperaba que ahora Jin le diera un explicación del porqué la había dejado.

- claro que si... el tiene muchas cosas que decirte.

- Pareces muy seguro de eso.

- Lo estoy. - Moonbyul lo miró con interrogación. - pronto sabrás porque si lo escuchas.

- Me asustas.

El chico rodó los ojos y rió.

- no puedo decirte nada porque no me corresponde... bueno si te lo iba a decir pero ahora que él lo va a hacer, no es necesario.

Se paró de su cama.

- ¿a dónde vas?

- iré con Jungkook. Quiero ayudarle en algo, aunque no seré de mucha ayuda, porque ya tiene a todo un equipo trabajando con el.

- Se mueve rápido.

- Lo se, apenas va una semana y ya está terminando detalles de la primera edición. - su tono de voz fue bajando al igual que su ánimo y su amiga pudo darse cuenta de eso.

- No pareces feliz con eso.

- No, si lo estoy. El está logrando muchas cosas por si mismo y si eso lo hace feliz a mi también me hace feliz...

- Pero... - sabía que eso no era todo.

- me siento un incompetente a su lado. - hizo una mueca con sus labios.

- Joonie...

- él es increíble y yo solo... estorbo.

- No. Nunca digas eso otra vez. - se puso de pie y lo tomó por las mejillas para que la mirara. - si me pusiera a pensar en cada una de tus cualidades nunca terminaría. Eres inteligente, sexy, tierno, tu creatividad y bondad son una maravilla, no eres menos que nadie.

Namjoon asintió ligeramente y su amiga lo soltó.

- Ahora ve y demuéstrale al mundo lo que Namjoon vale. - lo empujó levemente hacia la puerta y le dio una palmada en su nalga.

- ¡oye! Esto tiene dueño.

Salió de la casa y tomo el autobús que lo dejaría cercas de la casa de su novio, misma que estaba usando como oficina.

Habían pasado apenas unos días desde que dejó de ser el director de la empresa, y desde que salió no dejó de trabajar en sus proyectos, porque el planeaba demostrar que no necesitaba de sus padres para salir adelante, y eso se los demostraría sobrepasando las ventas.

Namjoon no le había contado nada de lo que Jackson le había dicho y no pensaba hacerlo debido a que no lo encontraba relevante, pero el no podía dejar de pensar en la idea de que ese chico tramaba algo, pues los últimos días estuvo recibiendo mensajes extraños de números desconocidos que decían "Vas a regresar"