HYBRID II

Capítulo 6.

Dione.

Había aprovechado para ir a La Reserva, Jacob y los chicos me habían comentado del inconveniente que habían tenido con Victoria y como Paul se había cruzado con Emmett Cullen después de que este intentando atrapar a Victoria cruzara el tratado.

Me sentí un poco culpable al no estar para ayudarlos, ya que Victoria había escapado pero, los chicos dijeron que fue mejor que no estuviera ya que los Cullen pudieron haberme descubierto. No es como que mi naturaleza deba ser escondida, solo no quiero que cualquiera sepa mi secreto.

Salí de la casa de Emily junto a Jacob el cual se había ofrecido a llevarme a clases esa mañana, además que quería aclarar un par de cosita con Edward, no me olía a nada bueno, pero debía ser importante como para que no le importara estar cerca del vampiro.

Ambos subimos a su moto y rápidamente se puso en marcha al instituto de Forks, al llegar habían varias personas afuera de este así que note perfectamente sus miradas puestas en nosotros, me di cuenta de cómo los ojos de la mayor parte de la población femenina que se encontraba afuera se dilataban al posarse sobre los dos metros y algo del cuerpo de Jacob, cuya complexión musculosa era impropia de un chico de poco más de diecisiete años, vi con el ceño fruncido cómo aquellos ojos recorrían su ajustada camiseta negra de manga corta aunque el día era frío a pesar de la estación, sus vaqueros rasgados y manchados de grasa lo cual por alguna razón hacia que mi chico se viera malditamente sexi, mi cuerpo se tenso, mientras que mi loba gruño  y comenzó a quejarse por no marcar a su Soulmate cuando tuve su cuello expuesto ante mi.

Jacob se dio cuenta de mi estado y sonrió de lado divertido, lo mire mal y me baje de la moto de un salto, rápidamente me tomo del brazo con cuidado impidiendo me irme, me giro y frente a todos planto un beso en mis labios, me separe de él con las mejillas ardiendo, me sentía avergonzada y mi loba ronroneaba esperando otro beso.

—Te quiero solo a ti ¿Lo sabes no? —murmuró con una sonrisa.

Asentí mientras una son risita boba se instalaba en mis labios. Me atrajo a su cuerpo y me abrazo, poco a poco su cuerpo se fue tensando.

Me separe de él un poco y lo miré, el rostro de Jacob era la máscara tranquila que yo conocía tan bien, era la cara que solía poner cuando estaba decidido a mantener sus emociones bajo control, entonces escuché la voz de Edward.

—Anoche te precipitaste en llegar a una conclusión equivocada —murmuró Edward —Te preguntó por el instituto porque sabía que yo estaría donde tú estuvieras, buscaba un lugar seguro para hablar conmigo. Un escenario con testigos.

Mire a Jacob, yo había estado junto a él cuando hizo esa llamada y como me lo imaginaba Bella mal interpreto la llamada.

—No me voy a quedar en el coche —dijo Bella.

Edward gruñó bajo.

—Claro que no. Bien, acabemos con esto de una vez.

El rostro de Jacob se endureció conforme ambos avanzaban en nuestra dirección y me atraía más hacia él, tal vez recordando la noche en que Edwards me había alejado de él.

Edward se detuvo a unos cuantos metros de nosotros, me gire aun en los brazos de Jacob para poder ver a los dos frente a nosotros, pero de manera que también pudiera ver el rostro de mi chico, Edwards mantenía a Bella detrás de su cuerpo.

“¡Dya!”

Me sonrió Bella.

“Holis Bels”

Igual le sonreí.

—Podrías habernos llamado —comenzó Edward con una voz dura.

—Lo siento —contestó Jacob, torciendo el gesto con desprecio —No tengo sanguijuelas en mi agenda.